Hotel - Restaurante Puerta del Alcázar

Venimos de Valencia, donde las mascotas son mucho más tenidas en cuenta en comercios y locales (Petfriendly). Tras la negativa de varios restaurantes a atendernos en terraza para poder comer con nuestra perrita Nala, el AMABLE PERSONAL del restaurante PUERTA DE ALCAZAR nos ofreció estar en la terraza interior acristalada y calentita, para a continuación servirnos COMIDA RIQUÍSIMA. Recomendaremos este restaurante a amigos y familiares y si dios quiere volveremos, ya que para nosotros ha marcado la diferencia.

Estuvimos alojados una noche con desayuno incluido en la habitación 112 esa habitación tiene bonitas vistas a la muralla. El trato en recepción fue muy bueno en todo momento la limpieza del hotel excelente y el desayuno muy bueno especialmente el pan.Nosotros teníamos el autobús para Segovia por la tarde noche y en el hotel tienen el servicio de Consigna de equipaje por lo que pudimos visitar todo el casco histórico sin ningún problema.Totalmente recomendable el lugar para alojarse, la ubicación es muy buena para conocer Ávila

Experiencia nefasta en el restaurante. Tuvimos que pedir la cuenta tres veces porque no la traían, después de 45 minutos por fin aparecen con la cuenta pero en vez de traernos la nuestra nos traen las vueltas de la mesa de al lado, nos tocó entrar a dentro a avisarselo porque seguían sin salir. Dentro nos tuvieron un buen rato esperando y encima después de todo nos faltaba dinero en la vuelta, se lo decimos y no nos quiso ni dar el dinero ni ninguna solución.

Un hostal bastante agradable para pasar unos días en Ávila, su ubicacion es inmejorable,enfrente al acceso de la muralla y cerca de todo lo turístico. Una habitación muy amplia,algo anticuada pero no es primordial. El estor estaba roto, y el grifo del lavabo también se salía, por lo que diría q le falta mantenimiento y cuidados. Las camas eran muy cómodas bajo nuestro punto de vista y hemos dormido allí tres días, la calefacción funcionaba perfectamente. Y otro aspecto que no nos gustó del todo es las vistas que daban al patio interior pero es verdad que apenas nos asomamos a la ventana ni estuvimos en la habita, simplemente para dormir y la siesta asique... No nos afecta este aspecto de las vistas.El personal super agradable y atentos.

Como puntos positivos la ubicación inmejorable frente a la misma catedral y a 20 metros de las murallas. Precio adecuado (alojamiento con desayuno tipo buffet libre incluido). Cuenta con un restaurante a las mismas puertas del hotel. Habitaciones con aire acondicionado y calefacción, limpieza diaria. Dispone de WIFI gratuito que funciona a la perfección.Puntos menos positivos, no dispone de ascensor. Las paredes son de papel y las habitaciones necesitan algo de cariño"

La comida estaba buena. Hay muchos primeros platos para elegir. Lo que no me gustó que la bebida solo incluye agua o vino y en fin de semana no se puede pedir el menú más económico.En cuánto al Hostal, necesita un lavado de cara. La ducha gotea, nuestra habitación que estaba en la primera planta, olía mucho la comida que preparan en el restaurante. A partir de las 23:00 no hay nadie que atienda en recepción, te dan un teléfono para llamar en caso de urgencia y una clave para entrar. En el desayuno solo hay una persona que atiende a todo,la recepción, comedor, bar. La situación inmejorable frente a la muralla.

La habitación que nos tocó muy anticuada (la104), las paredes diría que son de papel porque se oía absolutamente todo (CUANDO DIGO TODO ES TODO) de las habitaciones contiguas. Además fui con un bebé y su correspondiente carro por lo que lo lógico sería que nos hubieran dado una habitación de la planta baja, pero no fue el caso, nos dieron de la primera planta y sin ascensor.Las camas individuales de 90, con nórdicos que no eran ni de la misma medida.Lo único que valoro muy bien es al personal y su buenísima atención de 10 y su ubicación. El resto para nada recomendable.Las fotos de la web y demás son estupendas, pero no se asemejan a la realidad. No repetiría y por supuesto que no mo recomiendo.Para ser a 77 euros la noche me esperaba algo más.

Teníamos dos noches y solo nos quedamos una, preferimos perder el dinero de la segunda noche que seguir alojados allí. Cuando nos dieron la habitación no tenía nada que ver con lo que ponen en las imágenes, era una habitación enana, sin luz apenas (si esto hubiese estado en las imágenes del alojamiento ni tan mal, pero lo que venia a continuación era peor). La puerta del baño se abría hasta la mitad, si querías abrirla entera tenías que empujar bastante fuerte. La mampara de la ducha rota, y la ducha no tragaba agua, que tuve que esperar un rato para acabar de ducharme. El agua del grifo salía para todas direcciones menos hacia abajo... La cama estaba llena de pelos, el baño y la pared del baño también, y las sábanas sucias (dormimos sin meternos en la cama del asco que daba)... (En un principio pensamos que los pelos serian igual de la limpiadora, hasta que abrimos la cama y por dentro tenía pelos, y las limpiadoras que vimos tenían el pelo canoso.) Lo único que tenía bueno que la calefacción y la tele funcionaba. Creo que no hay nada peor que la falta de higiene.Pasando a otro punto, me parece vergonzoso, que una limpiadora (porque ella nos dijo que era la encargada de la limpieza) tenga que dar desayunos, estar pendiente de la cocina, de mantener todo limpio y a su vez de atender a los clientes en recepción, tuvimos que dar explicaciones a ella de porque nos íbamos una noche antes.Cada vez que alguien tiraba de la cisterna parecía que tenías las cataratas del Niágara dentro de la habitación, si subía alguien por las escaleras se escuchaba muchísimo, incluso los chicos que estaban alojados al lado, parecía que estaban con nosotros, de lo bien que se les escuchaba. Las camas incómodas, al día siguiente un dolor de espalda y cervicales increíble, que jamás nos había pasado en ningún sitio. Resumiendo una experiencia que espero que todo el mundo sepa la realidad y no se alojen aquí nunca. Cuando llegue allí y me encontré el panorama, fui a ver reseñas de Google, y creo que no soy la única que ha tenido esta experiencia, para que no digan que me invento las cosas adjunto fotos, también tengo videos pero no me deja adjuntar mas imágenes...

El hostal está ubicado genial en la misma puerta de la muralla el desayuno está bien poco variado. Las habitaciones muy antiguas la bañera tenía piquetes de óxido. Eso sí las camas muy cómodas. Si comes en el restaurante bastante bien y el servicio muy amable y simpático.

Muy buena experiencia mas de lo que esperaba para el precio, la habitación 210 con una vista muy linda a la muralla, muy buen trato del personal, la terraza climatizada esta muy bien para tomar algo y la comida muy rica.La reserva incluía el desayuno y también me ha sorprendido una mesa larga con varias opciones para desayuno y muy buena calidad de sus productos.