Restaurante/Arrocería Barraqueta de Mar/Barraca Beach

Cerca de la playa, y formando un bloque junto a otros 3 restaurantes. No es un sitio lujoso ni glamuroso, pero se come muy bien y está muy limpio y aseado. Raciones muy generosas, la comida muy rica y muy bien preparada, bastante variedad, y precios razonables para el menú. Y lo mejor de todo, el buen servicio y la amabilidad y paciencia de la camarera.

Lavabos asquerosos, ni papel de vater había. Platos CARISIMOS para lo que son... poca cantidad y elaborado con desgana. Pasotismo en el servicio excepto el camarero joven que fue muy simpático. Comentarios fuera de tono que no vienen a cuento y estan totalmente fuera de lugar. No se lo recomiendaría a nadie

Pedimos para comer dos platos cada uno. Paella, ensalada y codillo y estaba todo buenísimo y más barato que en el parque. Para repetir.

Muy bueno todo, menú por 15€ la paella de muy buena calidad. Servicio excelente. Cerca de la playa y sin tener que reservar.

Lugar estupendo para comer en familia, trato excepcional, rápido, buena calidad y amable. Ubicado en los mismos jardines de Canet playa, parque para jugar los niños y a escasos 5 minutos andando de la playa de Canet de Berenguer. Lugar idóneo si queréis celebrar cumpleaños y eventos especiales en la terraza del piso de arriba, acceso para discapacitados y con local cerrado si se reserva con antelación.

Después de esperar más de 25 minutos para unos chipirones a la plancha , y en noviembre, vamos que no hay mucha gente. Llegan fríos.No están malos , pero estropea estas cosas estropean la comida.Realmente no tiene malos precios tampoco.Pero .........Y de remate , en la cuenta, viene la ración de chipirones 5 euros más cara que lo que vienen el la carta.Menos mal que soy de revisar las cuentas, para bien o para mal , que conste.Este restaurante me ha dejado mal sabor .

(1/2) Pongo dos comentarios debido a que no me deja escribir todo lo que quiero en un solo texto.Nuestro primer día de vacaciones, llegamos al apartamento a la hora de comer y buscamos un restaurante cerca para 8 personas. Es ahí cuando nos topamos con este restaurante, grandisimo error por nuestra parte.Nos sentamos en la terraza y pedimos el menú de 11€, que corresponde a dos platos, pan, bebida y postre.Nuestros camareros fueron una señora y un señor con coletilla, del que hablaremos más tarde.De lo correspondiente a los 8 primeros platos, únicamente los 3 huevos rotos se salvan de la crítica, con una calidad suficiente (patatas frías y jamón de mala calidad) aunque dejando mucho que desear. La ensalada mixta no la juzgo porque en poner tomate, lechuga, maíz y cebolla no hay que tener un máster. El gazpacho con textura desagradable, grumosa, aguado, poco sabor y picatostes aceitosos. Las patatas bravas después de insistir varias veces e incluso acercarme personalmente al interior del local, llegaron a la mesa MUY tarde y cuando ya habían finalizado el resto sus respectivos platos. Las patatas, frías y con salsa no casera (en el menú ponía que era casero).Llegan los segundos platos y es ahí cuando explotamos. La fritura de pescado era un cachondeo, puesto que encuentras más verdura y patatas que pescado (el cual deja mucho que desear). Dentro del pescado que había, podíamos encontrar cabezas de pescado sueltas. El pimiento estaba en mal estado. El plato de oreja estaba refrita y carente de sabor. La brocheta de cajú ni es brocheta ni nada, además que la carne estaba helada. Y por último, llegamos a la joya de la corona: LOS ZARAJOS DE CORDERO. Una del grupo se pidió este plato de primero y se lo comió aún siendo regulero su sabor por el hambre que tenía y las horas que eran, pero mi plato de zarajos debe de ser analizado. De primeras me viene un solo zarajo cuando a ella se le entregan dos. Me viene crudo por dentro y con un pimiento malo y unas patatas frías. Para mi sorpresa, a los 10 minutos me viene aparte otro plato con una segunda pieza, teniendo esta un color amarillo en su interior debido a su mal estado y mala limpieza.Al llegar al turno de los postres le decimos al camarero de la coletilla que no vamos a querer porque la calidad de la comida es nefasta y, de primeras, hace oídos sordos de nuestra queja centrándose en si vamos a querer postre mientras se lleva uno a uno los platos enteros y sin tocar. Cuando nos volvemos a quejar, dice que no puede hacer nada y después de un rato, vuelve con la solución de que paguemos únicamente los primeros platos (50€ en vez de 88€ que sería el coste de los menús completos). No nos deja quejarnos y explicarle lo mala que es su comida, dándonos largas e incluso alzando la voz a una persona de nuestro grupo que desde el primer momento le trata de USTED y entiende su posición de camarero.Nos argumenta el camarero que lo que le contamos es un caso único y que no había pasado eso en todo el día, siendo un caso especial nuestro y tratandonos como locos, pareciendo que nos queríamos aprovechar de la situación para no pagar. No era cierto viendo los comentarios que tiene el establecimiento además que, sin ir más lejos, al levantarnos la mesa de al lado donde estaba comiendo una familia también se quejaba de la nefasta calidad de los alimentos y devolviendo algunos platos. Les pusieron la misma solución que a nosotros, pagar los 50€ (parece que era la solución común).(1/2)

Esta bien calidad precio teniendo en cuenta que esta muy cerca de la playa.Bocatas 9 euros, sándwich 6 euros.Los bocadillos están muy buenos y grandes.El morro está muy buenoEl sándwich de Salmón también está bien.Las patatas bravas no es de lo mejorEl servicio es rápido y bueno.Lo único que está fatal son los baños, muy sucios y descuidados.

Menú del día completo por 12 euros, con pan, bebida, postre y café. Comida muy sabrosa, en especial la costilla al horno (foto). Servicio muy atento y ambiente tranquilo, familiar.