Cafe Albert

Estuvimos anoche tomando algo y nos animamos a cenar.Muy buenos precios y personal amable.Las hamburguesas (de cabra y la Albert) estaban buenísimas.La única pega es que la música (melancólica) estaba a tope cuando llegamos y luego se llenó TODO de mosquitos y nos tuvimos que ir.Respecto al tema del Covid-19, estuvimos en la terraza y nos dio la sensación de que había demasiada gente junta, ya que las mesas altas tenían muchas personas de pie alrededor y no se cumplían las medidas. Por lo demás, el personal sí respetaba las normas.

Es un lugar acogedor, y colorido con para tomar algo eso pasó en nuestro caso, nos compramos una sobao pasiego para comer en casi y allí nos tomamos una cerveza para r frecar.

Después de esperar 1:30 por unos platos sencillos encima nos lo traen a su bola. Hemos pedido hamburguesas y nos ha llegado 2 mini bocatas en pan baguette. Encima al preguntar a una de las camareras porque tarda tanto la comida nos dijo que eso es normal pero es mentira un día antes estuvimos y salió todo mejor y más rápido. Aparte, dijo que la gente del pueblo que piden se les da prioridad para take away. Me pareció desencajado el comentario. Encima cuando nos llego la comanda nos dijo que se quedó sin pan de hamburguesa porque tuvieron mucha demanda para llevar y se olvidaron de la terraza. Y que bueno, sigue siendo lo mismo una baguette que una hamburguesa...en fin, no recomendable.

Estuvimos en el balneario y bajamos a cenar dos noches aquí. Sitio muy bueno. Comida muy rica y precio muy bueno. Servicio un poco lento, pero porque había mucha gente, parece que es bastante concurrido. Vale la pena esperar. Recomiendo y nosotros si volvemos seguro que repetiremos. Fuimos seis adultos y dos niños y comimos muy, pero muy bien. Al día siguiente pedimos un plato menos ya que las porciones eran abundantes.

Fui a desayunar un par de días en mi estancia en Cantabria y la tortilla de patata es espectacular

Magnífica tortilla.Para mí hacer el recorrido por esa carretera y parar es en esa cafetería es un auténtico privilegio tomar sus variadas tortillas de patata, con york y queso, con bacon... Están todas riquísimas.Cumple estrictamente la normativa Covid.Es parada obligatoria.

Un gran sitio para cenar con una amplia carta de sándwiches y hamburguesas, también para cenar de tapeo. Por poner una pega, las patatas fritas son congeladas. El Jefe unnpoco seco pero las camareras encantadoras.Cada día tardan más en servir. Si tienes hambre no vengas.

Sitio muy muy económico, de comida abundante y rica. Recomendado el sándwich de pollo y la hamburguesa de queso de cabra. También las delicias de pollo. La atención impecable, muchas gracias!!!

A pie de carretera, el café Albert, un local discreto con terraza, aparece reseñado en la guía Repsol y ha sido galardonado en varias ocasiones por su producto estrella: la tortilla de patata. Con las expectativas muy altas nos lanzamos a probarla: la cata no defrauda, está buenísima. Pega: si llegas a mediodía ya no les queda.

Bar con parking. La zona es bastante buena para hacer un alto entre Burgos y Santander, a medio camino. Los precios son normales, ni caros ni baratos , las tortillas están muy ricas y el café también. El local es amplio y agradable. Sería mejorable el trato a los clientes, ya que no es el adecuado....desgana, pachorra y a veces poco interés. Paro de vez en cuando...pero cada vez menos.