Hotel Vegano, ecológico y Pet friendly | O Viso Ecovillage

We booked 4 nights at O Viso as part of our small tour of Vegan hotels in Spain over the last 12 months.Having visited Casa Albets in the Spanish Pyrenees, MasQi in Valencia and Villa Vegan in Mallorca (2 days prior to visiting O Viso) we were really looking forward toVisiting the Eco Village.From the moment you are met by Pascale, checked in and shown around the facilities you are made to feel at home.The amount of work to take this from a derelict village to the beautiful Eco Village it is today cannot be imagined and Pascale should be commended for achieving what she has. The village retains the authenticity and feel of the original village but brought bang up to date. The rooms (We had Morangie) were large with separate bedroom, shower room with super power shower, lounge/diner/kitchenette and small balcony.Breakfast was a simple but tasty and filling experience with toasted bread with tomato and avocado, porridge with fruit and soja , fruit juice and coffee. Really enjoyable.We originally intended to have 4 evening meals but for the last 2 evenings we ate out in La Coruña as the O Viso restaurant was closed and also cooked on our final evening (There are no good vegan restaurant alternatives for some distance). The evening meals were not to our choosing and we totally appreciate it is difficult to cater for a small audience as we were the only guests for 2 evenings, but the meals were just OK. When you have a vegan hotel or restaurant the food generally needs to be exceptional as this is what will bring back clients and this is the only reason we gave 4 and not 5 stars.But please do not let this put you off…… the welcome, the rooms, the location, the staff, the views, the silence, the clean air and the atmosphere alone will bring clients back to this special place.The perfect location to enjoy nature, greenery and peace and quiet in this beautiful fertile green part of Spain away from the normal tourism.

Hemos pasado unos días estupendos en O Viso Ecovillage. Encontramos la tranquilidad que buscábamos. El entorno, las vistas a la montaña, un apartamento acogedor y ni que decir tiene los desayunos y cenas de su restaurante vegano, espectaculares!! Cabe destacar el solarium, que tan solo con el calor proporcionado por el sol, creará un espacio relajante en el que disfrutar de unas vistas maravillosas. Pascale y Ana son muy detallistas y se adaptaron en todo momento a nuestras necesidades teniendo en cuenta que viajábamos con una bebé. Nos hubiera encantado poder disfrutar un poco más de las instalaciones comunes de la ecoaldea el día de nuestra salida después del checkout, pero no era posible. Aunque lo entendemos, nos hubiera gustado poder contar con esta posibilidad tal y como nos ha ocurrido durante nuestra estancia en otros establecimientos hoteleros.

Segundo año consecutivo en el que escogemos O Viso para nuestras vacaciones. El paisaje y la propia aldea ofrecen unas vistas fantásticas y refrescantes; los interiores son muy cálidos a la par que estilosos y funcionales; el trato con Pascale y Ana súper amable y acogedor ; y la comida... mmmmn deliciosa y hecha con mucho cariño, en ocaciones aprovechando los productos de su propia huerta. En definitiva un plan estupendo para desconectar, cuidarte y dejar que te cuiden. Volveremos pronto!

Remanso de paz y tranquilidad. Ubicación perfecta, con una finca vallada enorme en mitad del monte, con vistas alucinantes que invitan a relajarse. 13 perretes rebosantes de amor que te reciben nada más entrar. Una dueña encantadora y siempre dispuesta a mejorar la estancia a sus huéspedes en todo lo que le sea posible. Las casitas son PRECIOSAS, muy bien equipadas (la cama es una auténtica maravilla). Detalles súper cuidados, todo es de origen local, vegano y ecológico: jabones, azúcar, tés, cafés... El restaurante tiene una carta riquísima y la recaudación del merchadising es para santuarios nacionales. En definitiva, ¡volveremos lo antes posible!

No dudes en alojarte en esta ecoaldea. Su anfitriona Pascale una bellísima persona, atenta y encantadora, al igual que el resto del personal. Comida preparada en el momento y riquísima. Nos sorprendió al paladar. Estancia muy agradable para desconectar del estrés diario. Se encuentra en un enclave espectacular y a menos de media hora de playas magníficas.Recomiendo 100%.

Nos hemos hospedado 4 noches en Agosto en este maravilloso proyecto que con mucho cariño y esfuerzo Pascale ha creado para que gente como nosotros que valoramos la naturaleza y respetamos la vida de los animales podamos pasar una vacaciones éticas y respetuosas. Pascale siempre esta disponible, es increible, sus pequeño restaurante es precioso con unHorno antiguo impresionante, la comida vegana me ha sorprendido mucho, ya que ha sido capaz de transformar la comida tradicional de la zona sin usar ningun producto animal. Las instalaciones un 10, el entorno un 10, el servicio un 10, cualquier proxima visita a la provincia de Lugo, este es nuestro alojamiento. Muchas gracias Pascale! Daniel y Charlotte

Hemos pasado una semana en la aldea con nuestra perrita y hemos quedado encantados por lo precioso y tranquilo del lugar. Hemos podido disfrutar de la piscina y de los paseos por su enorme espacio natural. Comida deliciosa preparada por Pascal con hortalizas de su propia huerta. El apartamento muy acogedor y limpio. Deseando volver!

Hemos vuelto por segunda vez y aún está todo mejor que el año pasado. En esta ocasión estuvimos en un apartamento y estaba todo perfecto. Asistimos a un taller de cocina vegana fantástico y rutas de senderismo. El trato inmejorable de todas las personas que trabajan en Ecovillage.Muchísimas gracias por todo, por hacernos la estancia a mi y a mi galga tan agradable.Sin duda, ¡volveremos!

Un lugar magnífico para desconectar y relajarse. La atención de Ana y todo se equipo hacen todo muy sencillo. Ideal para ir con perros, el recinto es muy grande y completamente vallado. Destacar el restaurante vegano, tanto los desayunos como las cenas estaban deliciosos todos los días. Repetiremos

Soy profesora de Yoga y colaboro con Pascale haciendo retiros de Yoga en O Viso. Estoy encantada de trabajar con ella y con todo su equipo. En ellos hay compromiso, responsabilidad, cariño, ilusión y alegría, lo que hace que mi trabajo sea mucho más fácil, pues se puede establecer un ritmo determinado de las actividades y crear, al mismo tiempo (y gracias a ellos), un ambiente acogedor y agradable.Las habitaciones son muy cómodas (sobre todo los colchones, y la suavidad de las sábanas) y, en relación a la comida es, sencillamente exquisita, de verdad.Es de destacar el interés especial de Pascale por salvaguardar la tranquilidad e intimidad de los huéspedes, cuidado difícil de encontrar en otros lugares.