Llares

Un buen restaurante, con una cocina espectacular en preparación, presentación y materia prima. No se lleva las cinco estrellas porque el servicio quizá no sea lo profesional que deba para el precio que tienen, y no invitan ni a un chupito tras la comida. Muy bueno el pulpo, las alubias con perdiz, el ciervo y el pastel de chocolate.

Nos atendió Pepe, el encargado, y la verdad es que tanto por el trato, como por las recomendaciones estuvo fenomenal.Los entrantes muy conseguidos y carne esta espectacular. Salimos a 75€ por pareja

Fuimos a comer porque teníamos ganas de probar el sitio.La verdad que deberían poner más luz, la zona un poco oscura, tuvimos que sacar la linterna del móvil para leer la cartaEl sitio agradable y acogedorLa comida con platos abundantes y la comida muy buena.

una vez mas paramos expresamente en Lagartera para comer en Llares y, una vez mas, la comida fue muy buena. es uno de los mejores restaurantes que se puede uno encontrar en la carretera y en una poblacion de tamaño pequeño. todos los platos, setas con miel y alli olli, las fabes con perdiz, etc estaban buenisimos con un vino Dehesa del Carrizal estupendo. un restaurante muy superior a la media.

No se siquiera como estaba las chuletas dé cordero que le pusieron a mi mujer pero lo que era el entrecot estaba de muerte, las chuletas serían de un viejo cordero. Precios algo elevados, una botella de Valdubon roble justamente el doble de su valor, pero lo comprendo, el lugar me imagino que sería una vieja casona adaptada. Le he puesto tres estrellas y sin le pongo dos también estaría bien puesta.

Buen sitio en mitad de la nada. Quedamos en este sitio a comer a mitad de camino y nos sorprendió gratamente. Bien de calidad, bien de cantidad. El precio bien tirando a un pelín alto. Con una carta no demasiado grande todo estaba bueno y original. Para mi gusto mucho plato de caza. Sitio acogedor de dos plantas. Arriba está el comedor (quizá le falte algo de luz) y abajo tiene unas salitas con algo de misterio" Fuera tiene terraza por lo que en el veranito se debe estar fenomenal. El personal bien."

Decoración muy cuidada, aunque el jardín merece un poco más de atención. El servicio simplemente correcto. Los entrantes, setas y ensalada de habitas un poco insípidos. Sin embargo, los segundos exquisitos. Bacalao excelente, bonito en escabeche sublime y una perdiz perfecta aunque pequeña. Postres caseros correctos.

Todo un acierto!!. Variedad de platos para compartir, así como carnes y pescados. Todos los platos que pedimos estaban muy bien preparados y como el comedor no es muy amplio la cocina esta perfectamente adaptada a los comensales del restaurante, los platos salen casi sin esperas y calientes. Muy buenas las setas con alioli e miel así como el paté. Tomamos croquetas, que nos habían comentado que estaban muy buenas...y sí pero, ¡ojo!, que son de jamón y espinacas (por aquello del gusto con las verduras). En los segundos, hay que decir que el solomillo ibérico y la carrillada estaban muy buenas, sobre todo el solomillo ibérico. El solomillo de buey quizá un poco más bajo de nivel que el resto, en cuanto a sabor y forma de ser preparado, pero la calidad era buena. Postre, recomendación del sorbete de cítricos.

Nos pusieron en una mesa que tuvimos que sacar la linterna del móvil para ver la carta y lo que comíamos.Estábamos deseando terminar de cenar para irnos por el calor que hacía. El aire acondicionado sería de adorno ya que no enfriaba y no es de recibo para un lugar que se supone de una cierta categoría...La comida no está mal pero al estar a disgusto ni se disfruta....

Un lugar espectacular y una comida deliciosa, sin palabras, las setas mas buenas que he probado y el pulpo que yo comí de lujo, el resto de comensales también quedaron muy contentos. Un lugar de referencia la que volveré siempre que pase por la zona, sin dudar.