Estimar Madrid

Nos hemos llevado una tremenda decepción. Hemos recibido un trato fatal y nos hemos gastado 700€ en una comida sin ganas sin trabajo! Nos han incluso dicho al llegar que la cocina cerraba pronto y que no tenían muchos productos!!! Ha sido realmente un fracaso!!! No volveremos nunca más y hablaremos de lo mal que nos trató el Maitre! Incluso ha tirado una copa de vino en nuestra mesa! No sabemos si estaba nervioso o es porque su prepotencia ha sido exquisita!!!! Hemos incluso roto las tarjetas que nos han dado porque no se las daremos a nadie!!!!! Adiós nunca más nos veremos!!!!

No sé si es por que tenía muchas expectativas pero el lugar nos decepcionó tremendamente. La comida fue correcta pero sin más. Siendo de la costa brava como soy, la gamba de Roses dejó mucho que desear. El restaurante en sí no me pareció bonito ni acogedor pero tampoco mal, sin más. El servicio fue pobre, aunque los camareros fueron correctos y amables. Hasta en dos ocasiones nos retiraron el plato mientras estábamos comiendo. Todo eran prisas y no había turno posterior. Lamentablemente ni lo recomiendo ni repetiremos y repito tal vez puse muchas expectativas, pero para mi gusto no estuvo a la altura.

Sitio espectacular!! Salimos encantados con todo, pero sobre todo, con el pescado a la brasa. El toque de carbón y de fuego que le dan al pescado, es único, hacía mucho tiempo que no probábamos un pescado tan bueno. Es un sitio caro, dónde se cuida el producto, pero merece la pena probarlo. Tomamos también almejas, navajas y ensaladilla de bogavante. De postre un milhojas muy rico. Muy buen sitio que merece mucho la pena!

És una maravilla en silu conjunto.Carta a base de producto. Todo el marisco que quieras: percebes, espardenyas, angulas, ostras, caviar, ... De excelente calidad del producto, cocina para saborear; todo a su punto de cocción. Josper en la cocina.El espacio es muy agradable, sin pretensiones pero muy cálido conaire mediterráneo.

Sensación muy decepcionante. Vaya por delante que suelo acudir a restaurantes de esta índole en Madrid y en el extranjero. En concreto, a nivel nacional y en pescados Elkano, múltiples japoneses y las grandes marisquerías de Madrid por poner ejemplos cercanos. Bien pues Estimar es fácil un 80% más caro. El precio disparado. Básicamente, por ubicarnos, las entradas y frituras sin los platos principales (cigalas y gallo en nuestro caso) ya fueron más caras que toda la cena en el mencionado Elkano, donde éramos 3 con vino y aquí 2y vino por copas.Para empezar las mesas están pegadas. No cerca, pegadas como en el burguer king lo que no procede. A un codo de distancia de las de al lado, inadmisible. La musica alta para un sitio así, una selección de Tangana, Delinquentes y demás más propia de un chiringuito que de un restaurante de 150€ barba colindante con las Cortes.El servicio muy normal, tipo taberna o tasca. Pedimos copa de albariños y en ningún momento se nos dio una carta de vinos para ver si queríamos botellas.Pero vayamos a la comida:Para empezar a la hora de pedir pescados, solo tienen gallo o dorada de toda la carta. Ni rey, ni rodaballo, ni ningún otro; tampoco tenían gambas. El producto es fresco pero no puede ser que sólo tengas dos pescados a elegir.Aperitivo que cobran excesivo, un boquerón en vinagre troceado. Muy rico.Ensaladilla de bogavante 28€, muy buena la ensaladilla como textura, ahora bogavante insípido, no merece la pena. Podían ser langostinos o gambas y no lo habrías notado. En este ámbito recuerdo el salpicón de bogavante de Gueyu Mar en Ribadesella, sitio también de brasa y mar, como algo glorioso y con la potencia de sabor que a este le falta.Frituras, muy ricas. Increíbles de punto y textura, ahora dos boquerones 14€, ídem con la raya.Almejas salteadas, muy buena la almeja pero la salsa falta de potencia y sabor, a 34€ la ración prescindible. Plato flojo flojo.Cigalas a la brasa. Muy buenas de sabor y el producto de primera. Pero claro a 59€ cada cigala no volvería en mi vida a pedirlas porque no lo valen, es un despropósito.Gallo a la brasa con bilbaina, muy bien de textura y sabor, estaba memorable. 89€ por 800 gramos, sale mucho más caro que el rodaballo de Elkano que es el mejor pescado que puedes tomarte en España y seguramente top a nivel mundial.Postre tarta de chocolate, rica pero 16€ es una ida de olla para un postre.Cena para 2, 360€ con 4 copas de albariño. Es altísimo el precio, especialmente comiendo con los de al lado encima, y con un servicio propio de un menu de barrio. Por la mitad de esa cantidad he cenado hasta reventar en sitios como O Pazo, Kabuki, Kappo, y pidiendo vino y todo tipo de caprichos y añadidos. Es mucho más caro que una barra de sushi con estrella michelin y 8 comensales a menu omakase en Tokio en la que estuve hace unos años. Es mucho más caro que el menu degustación de un estrella Michelin a escasos minutos de la torre Eiffel con vino en una ciudad en la que se paga por respirar al que acudi la ultima navidad.No repetiría y no lo puedo recomendar porque aunque algunas preparaciones son estelares esta fácil muy muy por encima de lo que ya seria un sitio similar, si no bastante más, y evidentemente en sitios que ya lo cobran acorde. Disparatado, muy decepcionante.

Suelo ser escéptico de este tipo de sitios pero me llevé una grata sorpresa. Una experiencia 10. Se preocupan mucho por la calidad del producto que sirven y eso hace que cada plato sea increíble. Probamos bastantes platos y fue una cena muy especial. El sommelier nos maridó diferentes vinos con los distintos platos y fue impresionante. Es caro, relativamente, ya que para todo lo que comimos y lo increíble que estaba todo, me pareció barato. Merece la pena probarlo mínimo una vez en la vida. Me encanta el concepto de cocina abierta, el personal no pudo ser más amable y le doy la enhorabuena a todos los chefs del local, porque es todo una experiencia irrepetible.

Fui con mi novio a celebrar nuestro aniversario y teníamos muchas ganas de conocer el restaurante por toda la historia de Rafa. Hemos salido maravillados con la calidad de los productos y las técnicas utilizadas por los cocineros pero lo que no va acorde es el servicio de sala. Varios puntos que os voy a contar.Desde el primer momento que nos sentamos hasta que nos fuimos, nos han querido vender e imponer los productos más caros de la carta, que no siempre son los más sabrosos. Pasa en todos los restaurantes pero nunca de forma tan intrusiva. Una estrategia no muy digna de ese tipo de restaurante. Al final de la cena había espacio para un plato más y básicamente nos han impuesto la tortilla de caviar con percebes. También hemos pedido recomendación de vinos por copa y nos han vendido los más caros sin importar si maridaba con el plato.Otro detalle que no nos gustó es que al momento de servirnos dos copas de vino la botella solo alcanzó para una copa y media. El somellier nos dijo que enseguida volvía a completar la copa y todavía seguimos esperándole. Pasó exactamente lo mismo con el vermut del aperitivo. Y a parte de todo eso, sentimos que el personal no estaba del todo preparado e informado de lo que nos servían, os lo digo porque somos personas muy curiosas y que nos gusta saber qué vamos a comer. No sabían qué caviar era, el queso de la tarta de queso y etc.Nos sorprende mucho porque somos personas que nos gusta el buen comer y nunca habíamos sentido que las ganas de vender lo más caro estaban por encima del trato y la felicidad del cliente.Ojalá que esto pueda servir para vuestro crecimiento.

Demasiado costoso.La comida es muy buena, pero se puede comer igual por la mitad del precios.Es una trampa de turistas.Adjunto la factura, para que comparen precios

Que se come muy bien, es una realidad indiscutible.Bien rico todo, incluso el panQue meten un palo que te crujen, también.Ejemplo de ello, una galleta con hojaldre 18€. Sin entrar en mas detalles..Y en la carta de vinos solo hay uno a 20€, salvo error u omisión. El resto de la nutrida carta está muy muy muy por encima. Sangrante, vamos... pero sangrante a rabiar...El servicio y la atención son siempre correctos. No es la primera que voy pero no volveré ni lo recomendaría a los amigos. Los perdería.

Producto y preparación espectacular y magnífica cava de vinos. para las 5* le falta un poco más de sosiego, ya que el personal es un poco agobiante, majos, pero acelerados. Los precios, sabiendo que son muy altos se pueden entender y al final sabes que pagas premium. Hubo exceso de platos, al margen de que nos dejarán probar cosas que no pedimos, fue demasiado y eso te hace sentir que no ha sido una comida redonda. buen pan.