Hotel Monasterio Rocamador

El entorno y y los edificios por fuera son muy agradables, pero las habitaciones que no están en el edificio principal (las de las fotos) dejan bastante que desear. Colchones que se hunden mucho, baño con una cortina de ducha de tela muy poco higiénica y llena de moho. Un precio muy alto para lo que es la habitación su duda. El servicio de camareros podría ser más amable y poner buena cara con los huéspedes cuando se le pide reponer cosas del desayuno o que le ayuden a arreglar la máquina de café.

La comida del restaurante nos ha gustado mucho con una carne de vacuno de muy buena calidad y muy bien conseguido su punto. Y una muy buena elección de aceites de la zona, de la cooperativa de Almendral. Muy buena opción toda la gama de vinos del Pago de la Encomienda.El personal excelente en el trato al tiempo que muy profesional.Sobre la habitación, muy luminosa, confortable y tranquila, con vistas espectaculares hacia el monte y las dehesas, esperábamos algo más de un cuatro estrellas, lo mismo que del desayuno.

El sitio es espectacular. Todo el personal del hotel es muy amable y servicial. Te ayudan en todo lo que necesitas. La piscina tiene unas vistas increíbles. La comida excelente. Muy recomendable. Tiene todo el encanto de encontrarte en un monasterio medieval. La cama es impresionante y un gusto descansar ahi. Solo un pero, deberían mejorar en el tema de la accesibilidad para personas con movilidad reducida. Visitarlo será todo un acierto. Díez sobre diez.

Es una pena que un sitio tan espectacular que lo tiene todo, instalaciones, sitio y producto. Vengas a cenar y sea un desastre en servicio y destrozo a los platos. Si no podéis dar cenas, mejor no las déis. Ver cómo se explota a un par de personas que no son cocineros ni camareros y se destroza el producto rompe con todo lo bueno que es este lugar.Lo vivido en la cena del otro día fue un atentado contra todas las expectativas y lo bueno de esta comarca. Un saludo

Lugar idílico para disfrutar en compañía. Nos gustaría resaltar, en especial, el trato recibido por la camarera Sara, nos ha atendido genial

Estuve en las casas rurales y no me gustó la decoración , creo que un poco viejuna, el servicio por parte del personal estupendo , estuvimos en una convivencia familiar y llevábamos para cenar un menú cerrado , no estuvo bien . Creo que volvería porque el verdadero encanto está fuera y si quiero comer bien comería de carta

Acabamos de celebrar una boda de unos amigos y la verdad es que la experiencia de nuestra estancia en el monasterio ha sido bastante deficiente.El monasterio dispone de habitaciones las cuales tienen unos precios desorbitados en comparación a la calidad y condiciones en las que están. Más bien, el alojamiento podría cumplir las características de un albergue a diferencia de un hotel.Los novios que reservaron el monasterio para la celebración de su boda probablemente no tendrían ni idea de que cuando les dijeron “tenemos habitaciones para vuestros invitados” se referirían a un bungalow con 6 camas compartidas para 3 parejas, con una sola ducha y unas condiciones higiénicas muy cuestionables en los baños.Al llegar nos sirvieron cena, por la cual solo nos informaron que el postre tendría coste. Para sorpresa la nuestra, a la salida nos cobraron la dicha cena al momento del check-out.Desde afuera podría ser bonito el sitio pero las prácticas y condiciones internas no lo hacen que nos resulte un lugar a recomendar y mucho menos desear volver.Una lástima porque podría tener potencial.

Impresiónate lugar, estuvimos en la habitación grande ideal para familias todo súper limpio, ambiente tranquilo, personal súper amable, nos quedamos a comer en el restaurante que era una antigua capilla espectacular y comimos de lujo muy buena calidad y precio. 100% Recomendable seguro que volveremos las habitaciones tienen chimenea en esta época con un buen libro son ideales para cargar pilas. Muchas gracias

El hotel es espectacular, nos gustó muchísimo. La habitación preciosa y muy amplia, la cama enorme y super cómoda, todo muy limpio. El servicio inmejorable, atendieron todas nuestras peticiones. La piscina es espectacular, pasamos allí toda la tarde, las vistas son increíbles. Y lo mejor la comida, todo exquisito y en cantidad. Volveremos seguro y lo recomendamos 100%

Solo pude estar allí una noche pero el sitio es espectacular. Lo mantienen fiel a sus raíces y se nota por cada uno de sus rincones. Habitación muy espaciosa, cama muy cómoda y perfecta para una escapada en un entorno muy tranquilo. El restaurante espectacular, muy bien producto y muy bien elaborado. Aviso en la agenda de volveré