Opus Dei

Totalmente decepcionante, la ración de zorza muy aceitosa, era todo grasa, los calamares eran congelados y al volver del baño había un párroco llamado Marcos ofreciéndole chupachus de cocacola a mi primito pequeño. Además no se puede ni pagar con tarjeta, en efectivo como en el siglo XIII

Alexandre tiene razón, últimamente he ido a probar la comida de este establecimiento y concuerdo totalmente, la zorza aceitosa, los calamares fríos, raciones totalmente escasas, no valen lo que se paga. No lo recomiendoEN ABSOLUTO. Por sierto, encontré a marquito, ahora lleva sotana y canta, se le ve felis.

Hatalmas hely!!!

no se merecen ni una estrella

Muy descontento con el servicio de masaje, creo que no volveré a alojarme en estas instalaciones. Por otra parte a mi hijo pequeño, Marcos de 3 años, le dijeron que le darían caramelos si les acompañaban y desde entonces no lo hemos vuelto a ver, creemos que por Paco el portero y secretario.Agradecería que nos devolviesen a Marquitos, te echamos de menos grande :(