Casona da Ponte

Sitio moderno, habitaciones de literas y vestuario con duchas muy bien. La nevera no funcionaba y faltaba algo de menaje, pero en general muy bien. Faltaba alguna zona común donde relajarse un poco. No dan comidas, pero sí cerca. La piscina municipal si el tiempo acompaña está muy cerca.

El albergue está muy limpio,la habitación dónde estuvimos nosotros era de 6 y genial.Creo que las tres habitaciones que había arriba eran las pequeñas. Habían dos baños arriba: uno para hombres y otro para mujeres.Las duchas estaban abajo y tb otras habitaciones y la cocina con comedor,muy ámplia.La ubicación con vistas al río,muy bonitas y zona tranquila.Tiene bar con terraza y dan desayunos.Pasamos calor porque el aire acondicionado lo apagaban por la noche y por las ventanas no entraba mucho fresco( fue la segunda semana de Agosto).Por la noche, cuando ya estábamos durmiendo, llegó un grupo gigante de niños que armaron tal follón que despertaron a todo el mundo. Me pareció poco profesional que no se respetara el horario de entrada y la mala educación por parte del grupo en cuestión y el dueño de no controlar la situación.

Me alojé en este albergue junto a mi familia, en total éramos 4 personas. Desgraciadamente tuvimos una mala experiencia con dos peregrinos extranjeros que estuvieron toda la tarde bebiendo en la terraza del albergue. Sobre las 8 entraron en la habitación bastante pasados de rosca y cuando un peregrino les pidió que no hicieran tanto ruido, se enfrentaron con él a voces y con una actitud muy desafiante. Me tuve que salir de allí con mi familia porque me temía lo peor. Luego se marcharon fuera a seguir su fiesta, no sin antes decirle a la chica de recepción que cambiara de habitación al peregrino que les había pedido silencio. Ante esta situación, fui a hablar con la chica, la cual fue muy atenta y le dije lo que había ocurrido y que tomaran medidas para evitar un problema cuando regresaran. Al poco tiempo llegó el jefe y volvió a preguntarnos a todos qué había ocurrido, asegurándonos que tomaría medidas. Pues no hizo nada, entraron totalmente borrachos a las 11.30, riéndose y hablando como si estuvieran solos, por supuesto nadie se atrevió a decirles nada por miedo. A mí hija de 15 años le tocó dormir a su lado, apestando a alcohol y con todos los ruidos corporales (no voy a dar detalles) que un borracho puede hacer por la noche. Fue vergonzoso. No sé cómo se puede ir con esta actitud al camino y como se puede permitir entrar en un albergue a gente borracha. En fin, que cada uno gestione su negocio como quiera, yo sin duda a este lugar no volveré.

Lo menos parecido a un albergue del Camino de Santiago. Más orientado a turigrinos que van a las habitaciones. La zona de literas apiladas en habitaciones mal ventiladas. ¿Solución? Tienen aire acondicionado, pero que no te toque como a mi que el chorro de aire lo tienes a medio metro. Solo quedan dos opciones, o los que están en la habitación se cuece o uno de los inquilinos muere de pneumonia.La aptitud del personal ante este problema de lo peor que me he encontrado nunca.La cocina muy mal equipada. Detalle. Mejor no pongo cucharillas de café y así desayunan en la cafetería. Y los baños escasos para la capacidad del albergue.Li dicho. Lo peor del camino.

Lugar perfecto para el descanso en el camino. Personal muy amable, buena ubicación y habitaciones muy bien cuidadas. Sólo un pero, el desayuno muy lento, no tiene capacidad para huéspedes que quieren salir todos temprano, algo importante en el Camino

Espectaculares vista al Miño. La habitación muy cómoda y limpias. En personal super atento y el pueblo muy bonito. Que más se puede pedir!!!!!

Edificio moderno, limpio y moderno.La habitación abuhardillada que nos tocó estaba bien, buen tamaño, el único pero el baño que eta muy pequeño.Camas cómodas, cosa que se agradece mucho.Lugar idóneo para descansar en el Camino de Santiago.

Buen sitio para alojarte en Portomarín. La única pega es que la ducha no salía del todo caliente y vamos a entrar en Diciembre, además estaba en otra planta que no era la de nuestra habitación. Y por otro lado que han quitado sofas y una mesa que había en el comedor que vimos en las fotos y creo que era muy útil ese espacio para leer o estar relajado.

Dejo cuatro estrellas por que en las habitaciones se siente incómodo por la oscuridad y también por la falta de secador de pelo. Por el resto, la atención de los empleados genial, dispone de lavadero de ropa, tendedero y la ubicación es fantástica y fácil de encontrar.A modo sugerencia, unas cortinillas en las literas sería otro nivel.

Muy completo y moderno.Está bastante bien ubicado.En la planta baja está el albergue y arriba la pensión.Puedes acceder y salir a la calle por ambas plantas.A destacar la amable actitud y eficiencia del chico que nos sirvió el desayuno, que estaba solo para atender todo el servicio de la cafetería.