Cafetería Play and Coffee

LO POSITIVO:La bolleria DELICIOSA. Los roscones de reyes INCREÍBLES. Todo casero y con mucha variedad de tés, chocolates y bebidas lácteas.El parque de bolas, ideal para niños más pequeños.LO NEGATIVO:Antes con la merienda, los niños tenían una hora gratis en el parque.Y lo que menos me gusta de todo, es que cada vez que vas, te cobran un precio distinto por lo mismo que se ha pedido siempre.Cosa que nunca entenderé.Esto ha reestado muchos puntos a la hora de seguir yendo, porque me ha ocurrido en varias ocasiones.Pero por todo lo demás... genial

El sitio es maravilloso! La zona de niños tiene de todo (colchonetas, jueguetes, pelotas, pizarra, mesa y el parqur de bolas), con monitors en horas punta. La comida es muy rica, la atención inmejorable,buena música a buen volumen...en fin,ideal con o sin niños. 10000% recomendable

Está bien. No es el típico parque de bolas enorme y muy ruidoso. Los empleados amables. Los precios y la comida bien. Lo único que no me gusta es que si no coges un menú infantil ( en vez de un donout pequeñito de rosquilla coge subo de tamaño normal) no te cuenta más caro y no te entra la hora gratis en el parque. Un niño de seis años no merienda un donout en el tamaño de una rosquilla.

Es un sitio muy agradable para ir, todo muy rico y el personal de barra encantador, eso si hay algún cumpleaños se desbordan un poco por la falta de personal pero lo que deberían mejorar las personas q están a cargo del parque de bolas ya que no prestan demasiada atención a los niños...he ido bastante y hay veces q están a otra cosa y ni miran a los niños.Seguiré yendo ya que a mis hijos les gusta mucho

Un lugar encantador, lleno de cosas deliciosas. Los niños se lo pasan grande. Un sitio muy cómodo. Salón aparte para la celebración de cumpleaños. Rincón de estar muy cómodo. El personal es muy amable. Pendientes de todo.

8-2-19 Hoy hemos estado merendando y al pagar nos llevamos una sorpresa.Antes era una hora gratis, ahora sin avisar es media hora y la otra media hora a 3€.Tiene Wiffi gratis pero la contraseña no funciona, probado en varios telefonos.30-12-18 por fin un sitio donde los enanos puedan disfrutar en Collado Villalba un parque de bolas y los padres podamos merendar con una gran variedad de cafes, tes y bolleria.Hoy esta lleno y hay muchos niños de edades varias. El problema que no hay nadie controlando el parque siendo de pago a 3€ hora, y los mayores corren y tiran a los pequeños.

Tienen un parque de bolas con monitor. Por 4 euros tienes merienda y una hora de juego, si no podes merienda te cobran 1,5 por media hora de juego. Ideal para desayunar o merendar y celebrar cumples. Genial para quedar con amigos con niños y disfrutar de tiempo para hablar. También celebran cumples.

Desastroso. Celebramos el cumpleaños de nuestros niños de tres años allí. En total eran 10 niños de las mismas edades y sus papás y mamás. Cuando lo contratamos unas semanas antes, nos 'vendieron' un menú para los niños con lo habitual (gusanitos, pizza, perritos...) incluyendo la bebida y tarta casera. Habría una monitora que jugaría con los peques, les pintaría la carita, cantarían canciones.... 12 euros por niño y las consumiciones de los padres a parte. La fiesta duraría dos horas.Llega el día y hora señalada. Llegamos al local y está cerrado. Llegan tarde y se excusan con problemas de tráfico. Vale. Comienza la fiesta al tiempo que organizan el local. Vale. Los niños pasan a la zona de juegos donde la monitora 'los atiende' al mismo tiempo que ¡A sus propios hijos! Dos. Uno de ellos un bebé al que llegó a dar el pecho durante la actividad. Estuvo más pendiente de sus hijos (lógico, pero poco profesional) que de los niños del cumpleaños. De pintar caritas, nada. De actividades, nada. Incluso uno de los pequeños se cayó, aunque sin hacerse daño, por fortuna. En fin. Llega la merienda, y los hijos de la monitora se sientan a la mesa. No pasa nada. Le digo que no se preocupe, que se sienten a merendar ¡Son niños! Además habían estado jugando con lis otros niños. Ni mucho menos nos molestaban, en absoluto. El problema es que su mamá, la monitora, no estaba haciendo su trabajo, un servicio por el que ya habíamos pagado.Bueno, seguimos. Llega la merienda y ni siquiera nos ponen los gusanitos. Peor. Los refrescos, Trina, son de litro y medio y estaban empezados!!!!Hasta aquí pensarán ustedes que soy imbécil... ¿Cómo no nos fuimos? Pónganse en mi lugar: ¿A dónde llevo a los niños y a sus papás?.Continuamos allí. Llega la tarta. Todo parece en orden... pero de casera, poco.Aprovechando el alboroto de la taUrta ylos regalos, cierran el parque de bolas: ¡CUTRES! Algunos niños se pusieron a llorar por no poder entrar otra vez. Es esto último lo que me ha llevado a escribir esto. Además de innecesario, poco elegante ¡Si ya nos íbamos! Menos mal que los padres y madres distrajeron a los peques y se les pasó. Ya fuera del local estuvieron corriendo por la acera y se les pasó.En definitiva, nunca más. Casi 200 euros, que pagué sin rechistar, para que el mal rato de los pequeños invitados y sus papás no fuera peor.Sólo decirte, que si lees esto porque estás pensando en ir a este sitio para celebrar una fiesta de tu peque, NO LO HAGAS. Créeme, me lo agradecerás.

Recientemente la dirección del centro se ha puesto en contacto con nosotros para darnos las gracias por las observaciones y así poder mejorar la seguridad del local. Un punto positivo a su favor.Hemos vuelto y ha cambiado mucho, recomendable. De hecho, celebraremos allí un cumpleaños.Nota anterior: Teniendo en cuenta que tiene una zona infantil y que es un espacio dedicado a los más pequeños, he de decir que tiene pésimas condiciones de seguridad: en primer lugar una puerta que da acceso a unas escaleras sin ninguna protección, de hecho mi hijo de dos años casi se cae por las mismas en la primera visita (esto sucede porque cuando hay mucha afluencia de gente se suele quedar abierta); en segundo lugar, las mesas tienen un canto muy peligroso (en la segunda visita mi hijo se dio un golpe en el ojo, con herida incluida y el susto consiguiente), y en este caso había dos personas del SUMMA en la cafetería y ninguna de ellas se dignó en atendernos; y, por último, aunque haya un monitor en la zona infantil no está atento a los niños y niñas que hay allí, porque entran y salen continuamente de este lugar, con el peligro que eso conlleva. En definitiva, espero que mejoren las condiciones de seguridad para los peques porque va a haber más de un disgusto. De momento, nosotros hemos decidido no volver, por la peligrosidad para niños de 2 años y por la nula atención que tienen los propietarios cuando se produce un percance.-------------------------------------------------------------------------------------

Hacía tiempo que no venía, y es una pena como ha bajado la calidad y la atención. Era un sitio agradable y tranquilo, con unos camareros muy amables. Los de ahora se enteran poco y no son amables. Además ahora la merienda de los padres no incluye la hora de juego de los niños, cosa que antes si.