Huerto del Abuelo Cebolleta

Magnifico lugar en el que se respira un ambiente estupendo entre huerteños dirigidos por el propietario de la finca el cual nos ayuda a que las cosechas salgan magnificas

En una de las rutas más senderistas de Granada, a la vera del Río Genil, se encuentra esta venta dedicada a ofrecer lo mejor de los 'productos kilómetro cero', algunos de ellos, de los huertos aledaños, y otros, lo más próximo posible. No esperes lujos en este recinto de la naturaleza, porque la esencia aquí es degustar los sabores de siempre en un entorno lo más natural y rústico posible.Recomendable hacerlo en su terraza y al mediodía. Para empezar picando, nada mejor que algún tomate cortado o alguna de sus ensaladas. Luego se puede abrir más el apetito con un revuelto de huevos con papas a lo pobre, y de planto fuerte, alguna de sus variedades de carnes a la brasa o, si se prefiere, algún fruto del mar, que también los tocan, como las gambas al pil pil o el calamar a la plancha. Para terminar, un buen postre casero como su tarta de chocolate.El servicio es rápido, agradable y atento. Una cosa importante, no te olvides de llevar efectivo, porque no tienen buena conexión de internet y el TPV no les va.

Hemos ido hoy a comer por recomendación de un conocido. Hemos ido un poco tarde pero con reserva. Entre la hora y ser entresemana estaba muy tranquilo. Nos ha gustado. Platos mas que generosos a precios razonables y buenos. La carta no es muy amplia pero bien. Volveremos con más calma que hoy era un poco tarde. Único inconveniente que no se podia pagar con tarjeta.

Es un sitio estupendo en verano se está muy fresquito y en invierno estás muy agusto con la chimenea la comida muy buena todo casero y muy bien presentado y los postres sobre todo las tartas hoy hemos ido con mi perro y le hemos pedido que nos pusieran una mesa aparte para no molestar muchas gracias

Increíble trato, comida y precio, el sitio de diez!recomendable 100%100

Me encanta. Todo buenísimo y atendidos magnifícamente

Espectacular todo como siempre, muy casero, que delicia. Me encanta ir andando y volver

No es un lugar de lujo ni nada por el estilo. Es diferente a lo que estoy acostumbrado. Pero ha tenido algo que me ha enganchado. La simpatía del dueño el lugar en sí. No sé explicar cual ha sido el motivo pero lo aconsejo.

Restaurante rural con chimeneas y braseros en invierno.Ofrecen comida casera rica y a muy buen precio.El servicio y la higiene podrían mejorar, pero nos gustó mucho

He estado aquí dos veces con amigos. La primera vez me cobraron por pan que nunca fue llevado a la mesa porque no lo pedimos, pero el dueño no hizo una lista de lo que pidió la mesa y su esposa lo agregó sin preguntarnos. La segunda vez estuvo bien, me detuve para tomar una cerveza rápida. ¡Aunque en ambas ocasiones el dueño estaba súper agitado y estresado! No puedo lidiar con lugares donde los camareros o los dueños están estresados, vengo a comer y relajarme y no a agitarme porque veo a otros estresados.