Hotel Señorio de Olmillos

Un castillo hecho hotel. Como castillo ha perdido todo su atractivo interior, pero exteriormente la restauración no está nada mal.Como hotel no se ve demasiado cómodo, el negocio lo apuesta todo a estar en un castillo pero no le llega.Puedes tomarte un café y te dejan visitar la parte superior de lo que era el patio de armas.

Excelente hotel, es un espectáculo visual y dormir en un castillo así una experiencia que se debe probar, nos toco una habitación con terraza que era una pequeña torre exterior preciosa la vista, personal super atento amable y educado, tanto la chica de la recepción como los chavales del restaurante son de un nivel exquisito tanto en el trato como en la comida que es realmente muy muy buena, zona de cafetería muy linda y agradable ambiente relajante y buenos precios. Lo recomiendo totalmente

La atención de Pablo y la comida muy buenos. Paramos todos los veranos a comer cuando viajamos a Cantabria, tanto al ir como en el regreso. La atención de los camareros siempre ha sido muy buena y especialmente la de Pablo García.

Este pintoresco Hotel diseñado con mucho gusto que ocupa una fortaleza que es una joya de la arquitectura militar medieval, construido por Pedro de Cartagena en 1446, fue un Castillo que en su momento no se utilizó para la guerra, sino como palacio de recreo. Actualmente se ha restaurado para el sector de la hostelería por sus propietarios. Precioso Palacio digno de visitar, hospedarnos en su magnífico Hotel Señorío de Olmillos de 4 estrellas y saborear los platos típicos Burgaleses de la zona en su Restaurante. Estupenda visita: Castillo, Hotel y Restaurante.

EL lugar es magnífico y muy bien conservado, es un castillo de construcción militar, pero sin fines bélicos, reformado como hotel - restaurante.muy bien cuidado, respetando en todo momento, la tranquilidad y el descanso del huésped.Cuenta con varias habitaciones... no muchas, algunas son suites (no llegamos a verlas) nosotros fuimos en pareja y estuvimos en habitación doble...la habitación era digna y contaba con todo lo necesario, eso si, era muy pequeña, yo soy grande y lo pasé en ocasiones francamente mal, no porque estuviera incómodo, si no por tema de espacio, pero vamos, que eran las antiguas celdas de un castillo medieval, con lo que el espacio...evidentemente, es reducido.El personal absolutamente profesional y muy amable, teníamos el desayuno tipo buffet, incluido....algo escaso, en cuanto a variedad, pero todo muy bueno.

Servicio malo, 45 minutos para que trajeran el 2º plato, y eso que el restaurante está prácticamente vacío.Y después de esperar, los 2ºs dejan mucho que desear… las patatas de acompañamiento bastante malas, y la comida no está en su punto.Los escalopes para los niños estaban carbonizados. Han tenido que traer otros.Es una pena, el entorno es maravilloso.

Hice una celebración con mi familia. 13 personas.La comida que nos dieron no la comerían ni los perros.No debería haber pagado pero por no montar un número delante de mis invitados , pagué pero espero que no vaya nadie nunca más.Mi hija vegana no pudo comer absolutamente nada. Unas alubias que estaban llenas de carne. Finalmente le trajeron unos espárragos trigueros a la plancha que eran unos espárragos echados directamente del bote al plato.Los que pedimos chuletillas de lechazo nos dieron algo seco de una semana antes.Todo así, unos escalopes para unas niñas que eran como piedras......en fin, solo se pudieron comer los helados de la cámara.Fue una experiencia terrorífica. El servicio también horrible.De hecho, nos dimos cuenta luego de que no había más que otra mesa en todo el restante.El dueño debería cerrar antes de ECHAR de comer en un sitio tan bonito.Pena de los tiempos en que se comía tan bien y encima no caro, cosa que ahora encima, lo es y encima esta experiencia que nunca olvidaré por la vergüenza que pasé delante de los míos.Tengo que decir que esto ocurrió el 18 de agosto. Es posible que ocurriera algo excepcional porque mi opinión no concuerda nada con las que he leído tan positivas. Si fuera así , me gustaría recibir al menos una disculpa y el porqué de lo que ocurrió.

Nosotros, más que a dormir, hemos ido al restaurante y a tomar algo. Nos gusta bastante el lugar, porque además de disfrutar por comer en un castillo con mucha historia (que por cierto, los camareros siempre están dispuestos a comentar, son muy amables) es un restaurante tranquilo que invita al disfrute. La comida estuvo muy rica y con un precio más que razonable (buena calidad-precio). El servicio muy bueno también, tanto Luz como Sergio. Cuando hemos ido a tomar algo, nos ha atendido Pablo, también muy agradable. De hecho, nos dejaron subir y ver tanto las vistas que ofrece el castillo como las almenas del lugar.Si estás de paso por Olmillos, no os lo penséis y pasad a disfrutar del castillo, que gente y su historia (que por cierto, es más relevante de que nos pensamos, por su estrecha relación con la corona de Castilla). Genial.Gracias por todo :)

El personal atento, la cena y desayuno, bien. El sitio es muy bonito y bien cuidado pero mi habitación sin ninguna vista, abres la ventana y a 50 cm tienes la muralla, me hubiera gustado ver algo, aunque sólo hubiera sido la calle y sino que hubieran puesto al menos una planta o una enredadera.