Hotel La Brasa de Riudarenes

Habitaciones muy espaciosas y muy limpias. El dueño genial, siempre atento al desayuno, y a cualquier necesidad que pudiéramos tener. Nos explicó unas cuantas rutas para hacer, tanto caminando como en coche. El pueblo, pequeñito , con muchas rutas para hacer senderismo y a pocos km de Santa Coloma de Farners, de Girona, de la costa,...y la gente, encantadora. Volveremos!!

El peor segundo hotel de mi vida. En el peor tuve que tomarme dos copas de vino para que no me importara dormir en el, pero en este penoso alojamiento, no tuve ni esa posibilidad, porque tenía que conducir para llegar a el.Desayuno gratis aparece en los servicios disponibles en google maps!!!!..... no me hagas reir, el comedor tiene cerrado el acceso a cal y canto.Lo que si dejan, es subir a las mascotas a las habitaciones, total con lo sucias que están.... que mas da!!Sucio, mal servicio, sin querer cuidar al cliente lo mas minimo.... hacen las camas cada dos días, apagan el aire cuando les apetece, casi nunca hay nadie en recepcion, instalaciones viejas, malolientes, y sucias......en fin NUNCA MAS!!!

Fatal. Es verdad que lo hemos reservado con poco tiempo, para un par de días pero al tener una valoración más alta de 8, esperaba un poco más calidad. Hemos ido con una beba de 7 meses, totalmente desaconsejable!! nos hemos quedado bloqueados en el ascensor 2 veces; las almohadas super sucias y nos dejaron sin agua caliente;Eso sí, el chico de recepción, amable, nada que reprochar.

Malo, 50 euros tirados a la basura, lo mejor la cama grande y cómoda. Lo peor todo lo demás, la limpieza brilla por su ausencia (suelo sucio se enganchaba los pies, bañera con pelos en desagüe de tiempo, el estrator capas de polvo atrasado, ventanas muy sucias y el armario olía pies.), el aire acondicionado que por eso cogimos este hotel por la noche lo apagan, despertando te por la noche del calor, abres la ventana y oyes el ruido de la máquina compresión del aire pero no a nuestra habitación.Nos enteramos al llegar que restaurante del hotel está cerrado de tiempo y en el pueblo no hay más según nos informa el recepcionista del hotel (el cual no era muy agradable), gracias que pedimos una pizza a sils y nos lo trangeron rápido.Las vistas de la ventana una pared que la tocabas con la mano.Definitiva el peor hotel que estado y no se debe considerar un hotel más bien un hostal de carretera como mucho. Y muy caro para lo que ofrecen,todo antiguo y desfasado.

La calificación de hotel le queda muy grande no llega ni a hostal o pensión. Tu puedes tener los muebles antiguos pero no por ello tienen que estar sin mantenimiento y muy sucios. La limpieza brilla por su ausencia y si encima aceptan animales la combinación mortal. La recepción no existe allí no hay nadie tienes que llamar a un teléfono para que venga alguien. La puerta de la calle está siempre abierta incluso por la noche. El cuarto de baño tenía el teléfono roto, el váter suelto, la cama con el somier doblado, las sábanas con un moco pegado y un largo etc.

Nunca suelo hacer comentarios, pero para que alguien no viva la nefasta experiencia que tuvimos, me veo en la obligación de hacerlo.El peor hotel que he estado en mi vida, prefiero dormir al raso! Un hotel donde no hay recepcionista, no hay luz, por no hablar de la suciedad... Sábanas usadas, pelos por la habitación, enchufes caídos, alfileres en el cuarto baño y para terminar una percha en la ducha. Tendrían que pagar por dormir aquí.

Buen sitio para pasar una noche solamente. Lo mejor la cama y la ducha. Lo peor la calefacción no la puedes poner a tu gusto y a primera hora en un mes de enero hace frío. Después está el chico de la recepción, antipático y mal carado, con pocas ganas de trabajar. Y no sirven desayuno.

No suelo poner malas reseñas las veces que lo hago, pero este lugar lo merece.En primer lugar, comentar que si estás algún tiempo en la habitación te acabas congelando. ¿Por qué? Porque aunque tú trates de poner la calefacción, no se pone sola hasta allá las ocho-ocho y media de la tarde… Con suerte algún día pillas que la ponen sobre las siete, pero normalmente la ponen tarde.En segundo lugar, la limpieza. Tienen en el mostrador una imagen que indica que si necesites limpieza pongas el cartel con el dorso verde (dinámica de todos los hostales/hoteles). Bien, pues lo pones a primera hora de la mañana y cuando vuelves por la tarde sigue el cartel colocado, que no han pasado por tu habitación para nada. Un día, sin más, me dice una mujer que había en el mostrador (bastante desagradable, sinceramente) sin venir a cuento, que son un hotel de 2 estrellas (yo creo que de hotel nada, son un hostal de carretera) y no se les permite un servicio de limpieza habitual como en los demás hoteles, que la limpieza de efectúa cada dos días. Me hizo gracia porque NUNCA me había quejado de que no entrasen a la habitación pese a tener el cartel verde puesto en el pomo siguiendo, simplemente, una “norma” que ellos mismos tienen en el mostrador de su hotel. Es más, tienen ese mismo cartel pegados no una, sino dos veces.Para seguir con la gracia y la reprimenda de la señora, es vergonzoso que llamen a eso que hacen “limpiar” o “limpieza”. Entran a la habitación y estiran la cama, nada más. No limpian el polvo que pueda haber en superficies, no barren y tampoco limpian el baño NINGÚN DÍA. Es de ser muy poco higiénicos, me tuve que buscar la vida para mantenerlo desinfectado.Puesto que mi estancia fue algo larga por el trabajo, un fin de semana tuve que dejar la habitación. Al volver el domingo, pese a avisar por la mañana que iba a volver, a las diez de la noche me encuentro la habitación del siguiente modo: Edredón sin funda y cama deshecha con pelos en las almohadas y en las sábanas. Las toallas del baño por el suelo y la papelera llena. El fin de semana ocuparían la habitación (cosa que me parece lógica y correcta), pero al quedar desocupada no la limpiaron y tuvieron la desfachatez de darme la llave. Subir y encontrarte esa escena cuando llegas cansada de un viaje algo largo en coche… para llorar.Otra cosa a destacar es la gente que ocupa las habitaciones. Gente que llega de madrugada armando escándalo y sin miramiento por las personas que madrugan para ir a trabajar. Lamentable. Además, todos bastante antipáticos (aquí incluyo a quienes regentan el hostal).Posteriormente leí reseñas actuales y vi que al parecer el hostal había cambiado de dueños y con ello vino el desastre. Lo confirmo.Algo positivo que puedo decir es que el colchón es bastante cómodo. Fin.Desde luego, no voy a repetir este hostal aunque sea la opción más cercana y económica que tenga entre mis opciones. No lo recomiendo en absoluto.

Lo malo que nos hemos encontrado ha sido que no nos ha dejado poner el aire acondicionado, tuvimos que pedirlo en recepción y al día siguiente ya estaba desconectado (toda la noche sin funcionar). Además, en la recepción parece que nunca hay nadie, todo oscuro y casi que cuando tocas el timbre te atienden a regañadientes.Por otro lado, las camas son cómodas y bastante limpias, el baño es grande y tiene lo necesario pasar una noche agradable. También se agradece el parking frente el hotel.

Calidad /Precio de habitación adecuado. Son espaciosos y nuestra habitación fue con bañera. Las camas muy cómodas y la Zona muy bonita. En la cooperativa delante del hotel venden un vino tinto del penedes a granel y está muy bueno. El desayuno bien, no se puede esperar más, y Carlos, el dueño una persona encantadora y ayuda en todo lo que puede... Todo muy limpio!!!