Latas Surf House y Escuela

Estuve aquí hace un tiempo. Todos fueron amables menos Cristina, que es la mujer de Ale el encargado. Nunca me han tratado tan mal en un surfcamp. Fue extremadamente maleducada y borde. Hizo que toda mi estancia fuera desagradable. No pienso volver ni voy a recomendar este sitio a nadie. Una vergüenza.

Más que un surfcamp. Personal amable y simpático siempre dispuestos a ayudarte. Tarifas de alquiler muy económicas, monitores profesionales y una comida riquísima.Las instalaciones son geniales; halfpipe, chiringuito con smothies, cancha de volley playa, reparación de tablas, entrenamientos específicos de surf, clases de yoga... volveremos seguro.

Un lugar muy pintoresco, tranquilo y con buen ambiente.Tomamos un aperitivo en la terraza y nos gustó mucho.

Llevo yendo 2 años ya y solo decir q estoy encantada tanto con con el personal como con el ambiente. Realmente se nota el buen rollo en el aire y recomiendo ir a cualquier persona q busque unas vacaciones inolvidables :))

He ido varias veces a tomar algo. Ambiente agradable y buen rollo. Terraza enorme y parking gratuito.

Me ha gustado el ambiente pero si quieres comer algo por la noche tiene muy poca luz, no ves lo que comes. En cuanto a la comida no he acertado pudiendo.

Muy buen surfcamp para alojarse y dar clases de surf. El desayuno está muy bien, pero los menús de comida y cena son algo caros a mi parecer.

Fui sola y tuve una experiencia de 10. Buen rollo todo el personal y toda la gente alojada, instalaciones ideales para descansar y pasar unos días muy entretenidos. Me encantaron las clases de surf con Purry, mejoré mucho y nos reímos un montón. Todas las monitoras encantadoras. El surf camp está cerquita de la playa, muy bien ubicado y precioso el entorno. Me habría quedado todo el verano.

Pasamos una semana con ellos en agosto, y aunque me habían recomendado mucho el sitio, me dejó bastante decepcionado. Pese a que el personal era muy agradable y las clases decentes, el sitio está planteado para extraer todo el dinero posible del huésped: Cosas como que no te dejen traer comida al sitio donde estás alojado para ‘obligarte’ a pagar el menú de 14 euros (que es simplemente un plato de comida de comedor) o que te hagan pagar por el alquiler de material por la tarde cuando ya has pagado por un paquete que incluye clases me parece un abuso. Por otro lado, el sitio está muy lejos de todo (incluido el mar), así que no te queda otra (porque tampoco puedes traer bebida) que estar en su bar, que estando en un pueblo de Cantabria iguala o supera los precios de muchos bares céntricos de Madrid. Por último el sitio estaba lleno de grupos de italianos que venían con paquetes cerrados a salir de fiesta y beber todo lo posible, así que tampoco recomendaría este surfcamp por el ambiente.

Espectacular experiencia!! Hemos ido tres veces a Latas este verano y cada vez ha sido perfecta. Los monitores de surf, bar, restaurante, personal de los alojamientos... Todos siempre atentos y dispuestos a ayudar en todo momento. Super recomendable!! Es un sitio fantástico para aprender a coger olas. Nosotros hemos dado clases con Laura, Javi y Guille y los tres son fantásticos, pero además, el resto de profes siempre están atentos para aconsejar o ayudarte. El único aspecto negativo es que se está acabando el verano y falta un año para poder volver... Por lo demás, cinco estrellas