Piscifactoría Las Fuentes

Experiencia buenísima, merece la pena acercarse y pasar un rato divertido, sobre todo para los niños, en entorno hermoso.El camino es de tierra y con baches no apto para coches bajos, pero tampoco es para alarmarse como pone en otros comentarios, despacito y disfrutando del paisaje se llega sin problema.Lo recomiendo a todo el mundo y sobre todo a familias con niños.Allí no hay bares, así que hay que llevar merienda para niños, agua o lo que se precise.Y lo único malo que puedo poner es que no hay wc, y eso si es un problema.

Muy caras las truchas ,no hay baños ni mesas,ni bar nada de nada .Muy bonito el sitio una pena que no tenga logística el camino de piedras malísimo íbamos con mis padres y casi rompo el coche que acababa de comprar caminos muy estrecho no quiero pensar que hubiera pasado si me quedo tirado con los abuelos .Pase un día fatal .para no volver nunca mas

Un sitio precioso y donde paser un buen rato ...los críos disfrutan pescando y se entretienen

El lugar en si es bonito, todo cerrado, solo nos dejaron pescar truchas en el lago de las garzas, el trato del personal fatal, no nos explico nada y metiendo prisa de que se tenía que ir. Nulo.

Sitio pequeño pero con mucho encanto , precioso ,naturaleza en estado puro ,puedes pescar truchas y llevártelas a un precio módico te dan caña y señuelo .Un poco lejos pero merece la pena . Si vais llevaros Autan ( mosquitos como aviones ) . Pero volveré ....

Asentado en un bello lugar, con un entorno de manantiales de gran pureza, la piscifactoría nos permite pasar un rato divertido con los peques pescando truchas, allí disponen de todo lo necesario en alquiler y pagas lo que consigas pescar, para llevar a casa y disfrutar de un plato de pescado, más fresco imposible. Si no quieres pescarlo tu mismo también puedes comprar el pescado vivo para llevar a casa.

Entorno precioso. Te alquilan las cañas de pescar para que pueda sacar tus propias duchas y te las cobran al peso.Puedes ver muchas de las piscinas.

Espectacular el sitio, tú vas ahí y te pescas tus truchas más agusto que nadie, luego las pagas y te las llevas, si no tienes caña allí te dan una y te dan cebo también. Si quieres estar un rato largo pescando vete al estanque grande que ahí cuesta más que pique el pescao, si lo que quieres es pillar pescao vete al pequeño que caen como moscas. En resumen es como un paraíso para el pescador frustrado que no es capaz de pescar una trucha ni a tiros en libertad pero que está de escándalo para echar el rato y llevar algo de pescao pa la casa. El sitio está en donde Jesucristo perdió la chancla eso sí, no obstante eso es en parte beneficioso porque así no se llena de cansalmas y vamos los que realmente nos interesa el mundillo

Es un lugar apacible, me gustó, lo único es que las normas que tienen expuestas observé que algunas de ellas no se cumplían como por ejemplo la entrada de los perros, otra cosa es que no tienen a la vista los precios de alquiler de las cañas de pescar y el precio de las truchas.

Realmente merece la pena, nos ha encantado. Especialmente si vais con niños, porque ellos pueden pescar y es muy fácil hacerse con los peces. Te dan la caña, el cebo y hay dos piscinas o lagunas, con muchos peces. Una aventura para los niños.