HOTEL RESTAURANTE Val de Pinares.

Espectacular el entorno y muy cuidada la finca, servicio excelente, preciosas vistas, rica comida, la zona de piscina muy tranquila y bonita.La granja y los animales ideal para dar un paseo, a los niños les encanta!Paz, desconexión.Cercano a rutas como las de las esculturas, cascadas...

Hemos estado este fin de semana. He de decir, que hemos vuelto a casa encantados y con ganas de volver. Mi hijo de 5 años está deseando volver a disfrutar como lo ha hecho este fin de semana. Nos han tratado de maravilla, y desde aquí agradecer el trato humano y de 10 por parte de Raquel, los camareros, la chica de la limpieza, TODOS!!! Y la comida BRUTAL!!! Gracias por hacernos más fácil un fin de semana maravilloso.Volveremos sin dudarlo

Hemos estado este fin de semana, el hotel es una pasada, tanto para ir con pareja, como con toda la familia. Está rodeado de montañas, tiene unas vistas fantásticas desde la terraza. Bajando por el jardín, está la piscina, zona para los más peques con columpios, y pista de tenis/futbol, siguendo el camino se pueden visitar distintos animalitos, como un caballo, cabras, gallinas y pavos reales....La comida genial, tanto el desayuno como la cena, que fue lo que probamos, estuvieron de 10.El trato con el personal del hotel ha sido excelente, con la chica de recepción, los chicos del restaurante y personal de limpieza, todos muy simpáticos, atentos y educados. Sin duda, un sitio al que volver.

Volveré sin duda. Es impresionante el entorno natural lleno de pinos y chopos que se ven desde lo alto del valle. Tiene varias rutas de senderismo que te llevan a cimas donde se puede ver el atardecer. El hotel es muy cómodo y la piscina espectacular. Lo mejor la comida y el servicio. Juan el camarero es un gran profesional y no nos ha faltado detalle con él.

El entorno muy bonito, el hotel muy bien, habitaciones aceptables, lo que mas me disgustó es que te cobren 18€ por menú y te cobren la bebida a parte que fue 1 botella de agua, sin duda no volveremos, no me quejo del precio sino de que no incluyeran la bebida en el menú

Reservamos una habitación para pasar el finde semana, y cuando llegamos nos sorprendió mucho mas de lo que esperábamos, el paraje en el que esta es todo una postal.El servicio no puede ser mas amable, tanto del hotel como del restaurante.La calidad del restaurante es intachable, nos gusto casi todo, y lo que no nos gusto no estaba malo, solo que no era una comida que no nos gusto, pero no estaba malo ni mal echo, he decir que estuvimos comiendo y cenandi, Quizás no tiene mucha variedad, pero creo que es normal por los servicios de la zona, creo que el trabajo que hacen es intachable para lo que hay en la zona, ofreciendo siempre un un par de primeros y un segundo de carne y pescado.El desayuno me sorprendió mucho a su favor me esperaba menos y hay lo suficiente para empezar el día con fuerza y un precio muy razonable tanto el menú de comida y cena como el desayuno.La limpieza perfecta.Esperamos volver muy pronto.

Un muy buen hotel rodeado de naturaleza casi virgen. Servicio muy atento y amable. El acceso es mejorable y precisa un reasfaltado, pero son solo unos cientos de metros. Hotel algo obsoleto pero con decoración adecuada a su entorno.

Un espectáculo de lugar , en cuanto al hotel, MUY LIMPIO, LAS CAMAS MUY CÓMODAS (colchones nuevos), EL PERSONAL MUY ATENTO Y AGRADABLE. En cuanto al restaurante : COMIDA EXQUISITA , y trato muy amable...agradecemos a todo el equipo lo agradable que no han hecho los días que hemos pasado alli y esperamos ansiosos poder volver.

Hemos tenido la gran suerte de disfrutar un fin de semana en este precioso hotel, con un entorno mágico, rodeado de naturaleza, inevitable no conectar allí con la paz del lugar. El personal es encantador, lo han dado todo, la comida espectacular, abundante, riquísima, estoy deseando volver.Viajamos un grupo de empresarios para hacer trabajo de Liderazgo, y aunque fue inevitable el bullicio, conseguimos hacer espacios de tranquilidad.Lugar adecuado tanto para salir en familia, pareja, amigos incluso sólo para desconectar.100% recomendable. VOLVERÉ sin dudarlo!!!

Un lugar precioso, muy tranquilo, rodeado de naturaleza, muy bien cuidado, césped impecable para tumbarte a leer horas, buena comida, servicio amable y con rutas para hacer desde ahí mismo, sin tener que coger el coche.A pesar de estar en mitad de la montaña me sorprendió que no había no un mosquito.Para ir con niños o solo, a reconectar y disfrutar del silencio y las vistas.Volveré sin duda, gracias por todo!