Crematorio de Monjuïc

Ayer asistí a la ceremonia de despedida de mi cuñado. A pesar de las restricciones impuestas por el Covid, pudimos acceder todos los familiares al interior de la sala de despedida.El féretro estaba en una especie de 'piscina' sin agua situada en el centro de la sala frente a la puerta de entrada. A derecha e izquierda butacas tipo sala de cine, para acomodarse. La sala con forma de pirámide estaba con luz de baja intensidad mientras se proyectaban bellas imágenes sobre un mostrador a modo de pantalla a baja altura. A la vez sonaba una melodía al piano que acompañaba sin molestar.Pudimos despedirnos de él y colocar flores sobre el ataud. A una señal se colocó la empleada tras el mostrador, accionó un dispositivo y el féretro comenzó a descender lentamente hasta que desapareció de nuestra vista y a continuación se cerró la compuerta del fondo de la piscina".Descansa en paz."

Muy bien

Atención muy buena .personal muy amable!

La organización mala, 1h esperando sin que nos indiquen el motivo... Mala gestión, no sé si siempre es así... .

Hace dos años falleció mi marido, y por tengo que decir que en el crematorio me lo hicieron mucho más fácil, en todo momento estubieron con nosotros para lo que hiciera falta, todos sus amigos y familiares pudieron despedirse de él en un ambiente de paz. Gracias.

Penoso, indignante y triste. Vamos a recoger las cenizas de nuestra madre y nos devuelven la urna sin la prótesis de titanio que pedimos encarecidamente" y se disculpan con un " bueno será un error y se habrá tirado a la basura" . Me enfado y digo que eso no lo tira nadie y... encima se me ofende la persona que nos atiende

Nos han atendido de maravilla y siempre que he ido allí ha sido muy emotivo, muchas gracias por todo

muy bonito por dentro ,pero el cementerio en general es muy cutre

Gracias Andrea y Jordi por el gran trato y tacto que habéis tenido con mi familia y conmigo. Gracias por haber hecho posible que el poder cerrar la etapa con mi padre fuera tan cercana. Ha sido un servicio, un asesoramiento y un trato humano que muchas veces para estas situaciones se necesita. Toda nuestra gratitud de la Familia Barroso.