Hotel El Sella

Precio razonable. Ubicación inmejorable. Habitación amplia, limpia y agradable. Puede que escuches ruido ya que justo debajo hay un restaurante pero es lo que tiene un hotel céntrico. Para un fin de semana está genial. El desayuno nos pareció caro, por eso no lo cogimos. En la acera de enfrente hay una confitería que pone unos desayunos de chuparse los dedos por mucho menos.

Nuestra estancia en el Hotel El Sella en Cangas de Onís fue muy agradable. La ubicación al lado del puente romano es inmejorable, permitiendo un acceso fácil a los encantos de la ciudad. La atención de la joven que nos atendió fue excelente, respondiendo amablemente a todas nuestras consultas.La habitación, aunque con un techo tipo buhardilla que puede requerir precaución alrededor de la cama, para no golpearse la cabeza, estaba limpia y bien mantenida.Decidimos disfrutar del desayuno en el hotel un día, y fue satisfactorio. Sin embargo, en los días siguientes optamos por desayunar en los lugares cercanos al hotel, lo que también fue una elección acertada.En resumen, el Hotel El Sella en Cangas de Onís ofrece una ubicación estratégica y un servicio amable. A pesar de algunos detalles en la habitación, la limpieza y la atención recibida crearon una experiencia positiva. Una elección recomendable para explorar la hermosa zona de Cangas de Onís.

He tenido la suerte de alojarme este fin de semana en el hotel. He escrito suerte porque la ubicación del hotel creo que es estupenda. El trato de la persona de recepción ha sido muy bueno. Por poner alguna pega, diría la altura del cuarto de baño en las habitaciones abuardilladas de la 4a planta, pero nada que no se solucione fijándose un poco. Repetiré hotel cuando regrese a Cangas. La habitación limpia, cómoda, sin apenas ruido a pesar de estar en todo el centro y la cama, cómoda y muy confortable.

Estuvimos muy a gusto. La habitación es amplia, con una cama grande y cómoda. Muy buena ubicación, tienen reservadas plazas de aparcamiento frente al hotel para carga y descarga de maletas. El único punto negativo es que la entrada es a partir de las 17:00, lo cual me parece muy tarde.

El hotel está ubicado justo al lado del puente romano de Cangas.La habitación es amplia, el baño no tanto, pero suficiente. Lo que si notamos es que hay bastante ruido tanto en la calle como en otras habitaciones, se oye mucho.El aparcamiento por la zona está complicado, no sé si es debido a la temporada, ya que fuimos en agosto. Hay un Parking de pago no muy lejos.Hay supermercados, estancos, bares y restaurantes por la zona.

Muy buen hotel,las habitaciones muy buen grandes,todo muy limpio y muy cuidado,lo malo que no tiene Parking ni casi sitio para parar y dejar las maletas,por lo de más muy bien,todos los trabajadores muy simpáticos y muy amables.

Es un justo 3 estrellas, el hotel es el indicado si estás de paso y buscan una estadía de 1 noche.Las habitaciones correctas aunque la cama supletoria no era nada cómoda. Ninguna tiene heladera por lo que tuvimos que rentar un cuarto de categoría Deluxe.El baño era correcto, pero con ciertos detalles como la presión del agua y el secador de pelo no funcionaba.En términos del servicio es aceptable, la chica de mostrador súper amable y dispuesta pero en la noche no hay servicio de recepción.El desayuno por 9€ es muy simple, y le faltan cosas básicas como fruta. Le pedimos una banana y la camarera nos comentó Todavía no vino el frutero

El personal ha sido super amable. Todas con una sonrisa y haciendo todo lo posible por ayudar (Nazaret ha estado super acertada en sus recomendaciones y nos ha ayudado mucho).La ubicación es inmejorable.Las habitaciones son muy amplias y la cama muy cómoda. Un detalle importante para las que tenemos pelo largo: tienen un buen secador de pelo.La única pega fue que no había un minifrigorifico y al viajar con un bebé de 11 meses lo habríamos agradecido.Subimos a los lagos de Covadonga pero como estaba nublado no vimos nada. Tenemos que volver y ya hemos dicho que repetiremos hotel

Muy contentos con la elección de este hotel en nuestro viaje a asturias y cantabria. Está justo al lado del puente romano, la habitación nos gustó mucho y lo mejor ha sido la atención y las recomendaciones que nos hizo Nadia, la recepcionista. Muy recomendable.

En vez de una habitación parecía un zulo.La habitación era muy muy pequeño además sin contar que la mitad de la habitación no se podría ni ponerse recto ya que estaba abuhardillado.Apenas tenía una ventana minuscula que ni entraba la luz en todo el día.Sin contar con el desayuno que es a un precio desorbitado 10 euros por persona que apenas hay algo de croasant y algo de cereales.De los peores hoteles que he estado. Para nada recomendable.