Casa Rural Castillo de Añón

Fantástico!Es acogedor y muy bonito, maxima tranquildad y estancias confortables. Nos atendió Curro, un trato excelente y amable además de ser muy simpático. Hizo una visita guiada magnífica y nos enseño el castillo, la hermosa iglesia que tiene al lado (del romanico- gotico) además de una excelente lección de historia.La gente y el bello y curioso pueblo en general amables y atentos.Muy recomendable.

El castillo es un sueño. Curro es super buen anfitrión, dándonos un montón de recomendaciones y contándonos historia de la zona. Voy a recordar con más cariño el castillo que el resto del viaje ❤️

Fui con mi hija de 3 años. La vestí de princesa. Estaba en un castillo del siglo XIII (con comodidades del siglo XXI). Solamente ésto ya tiene mucho valor, pero hubo algo que hizo la experiencia invaluable: el Comendador del castillo. Estábamos de paso y no nos quedamos ni 24 horas, tiempo suficiente para que Curro nos regalara un recuerdo inolvidable. Se vistió y nombró a mi hija Princesa del castillo en el salón de armaduras. Que siga habiendo castillos es magnífico, que siga habiendo personas como Curro le devuelve a uno la esperanza. Muchas gracias por todo. Volveremos.

A ver,,, es un castillo, no os esperéis un hotel o un castillo prefabricado, y eso es el encanto está muy chulo, vives la experiencia de hospedarte en un lugar de la edad media a las faldas del Moncayo y alrededor de muchos pueblos muy bonitos con sus leyendas.Curro el propietario es una persona encantadora, muy divertida y atento continuamente con sus huéspedes, además de forma gratuita todos los días hace un tour contando la historia del castillo de las gentes y de la zona, y debo de decir que esta muy bien informado, dándole un toque de humor y teatral a las historias es un crak.Si buscáis tranquilidad, naturaleza y algo diferente no lo dudéis.En esta semana del puente de la constitución coincidió en el pueblo un mercadillo medieval, alrededor del castillo y gente disfrazada de la época, damas y caballeros muy chulo.

Lugar fantástico, comida deliciosa y Curro, la persona que regenta el castillo ...un verdadero descubrimiento.Estuvimos 4 parejas , la primera sorpresa fue encontrarnos allí a Curro , persona con un pasado verdaderamente sorprendente, lo siguiente fue la exquisita cena y las habitaciones del Castillo con un encanto especial por el hecho de estar alojados en un verdadero castillo, y por último fue el desayuno, abundante y riquísimo, y la visita al castillo y la iglesia con Curro como guía, un auténtico showman.Gracias Curro por hacer que nuestra estancia allí fuera simplemente genial e inolvidable.

Castillo medieval en pueblo pequeñito del Moncayo. Toda una sorpresa pues no había estado nunca en esta zona.El castillo es un rincón fantástico, dentro del pueblo, con una rica historia explicada por su propio anfitrión, Curro, una persona encantadora que nos narró su interesante pasado.Las habitaciones tienen ese ambiente legendario que te hacen imaginar cómo sería vivir en el castillo en su esplendor.En general, una experiencia muy recomendable.

Castillo con encanto, tranquilo y acogedor. El servicio de 10. Curro y Susana son encantadores. El desayuno genial y la visita guiada al castillo y a la iglesia es divertida y didáctica. Recomendable y para repetir.

Una estancia maravillosa en un rincón especial, con un huésped que nos ha brindado todas las comodidades posibles, tour por el castillo incluido.Gracias de corazón al comendador del castillo Curro Fatás por su amabilidad y alegría. El castillo es espectacular y dormir en él es una experiencia única.PD: no os perdáis las mermeladas del desayuno, una auténtica experiencia gourmet.

Castillo con muchísimo encanto, en un lugar, como no, encantador. Añon en un pequeño pueblo y el castillo un descubrimiento. Gracias al comendador Curro, que nos trato con tanta simpatía y encanto y nos hizo una visita guiada al castillo y la iglesia, que encierra tesoros que no esperas encontrar en un lugar tan chiquitín.Habitaciones simpáticas con gruesos muros de piedra pero calientes y acogedoras. Desayuno correcto. Un placer haber estado allí.