Hotel Villa de Suances

El hotel es correcto y está limpio. El personal es muy amable y el desayuno también ha estado a la altura pero no es para volver porque el olor a humedad en la habitación era inaguantable.

El hotel tiene una buena ubicación y una atmósfera agradable, tranquila y relajante . Buenas vistas y muy cerca de las mejores playas de Suances, desde donde puedes ir andando en pocos minutos. Lo mejor de todo es el trato del personal: amable, simpático y con ganas de agradar. Desde la señora de la limpieza, hasta las camareras, sin olvidar las chicas de recepción, hacen lo posible por que te sientas agusto. No es un hotel nuevo pero está muy limpio. Las mascotas allí son parte de la familia y eso se nota. Hemos estado muy agusto y sin duda volveremos.

Totalmente deficiente en múltiples aspectos.Empezamos por la recepción, entras y la sensación de bochorno es horrible, acompañado de un olor digamos que característico. El ascensor enano, caben dos personas estando incomodas. Las habitaciones, como el estado del hotel en general, antiguas y descuidadas. Las habitaciones no tienen aire acondicionado, detalle que ya sabíamos, lo que no sabíamos es que abrir las ventanas era un deporte de riesgo por la cantidad de bichos e insectos que entran al estar el edificio lleno de enredaderas. Las habitaciones tampoco tienen neverita, ni una mesa supletoria, las paredes necesitan chapa y pintura, el baño una reliquia, el botón de la cisterna tenía vida propia…Pedí una plancha de ropa y me dijeron que no tenían. Todo esto en un hotel tres estrellas, con precio como tal.Supongo que se me pasarán muchas más cosas, desde luego no es un sitio al que volvamos, hay hoteles en Suances de tres estrellas por el mismo precio y que aceptan mascotas infinitamente mejores.Lo único bueno del hotel el personal, profesional, cercano, amable y queriendo agradar.

Buenas vistas, buena ubicación y aceptan a perros cosa que me gusta aunque había que pagar 10€ por día aparte… pero bueno, pero por lo demás fatal… al dormir nos clavábamos los muelles de los colchones… todo muy antiguo, nada de limpieza, en el desayuno no había de nada continuamente, nos teníamos que adaptar a lo que había ( no había cubiertos, no había nada repuesto, vamos que el que tonto el último) y aun así había que pagarlo… preguntar si tienen sacarina y su respuesta fue “en un rato”.Ni lo recomendaremos, ni volveremos.

Esta cerca de todo. En una zona tranquila y puedes ver las vacas desde la ventana. Y tiene piscina y todo. Esta el edificio un poco viejo y necesita una remodelación, pero si voy x la zona intentaré alojarme de nuevo allí.El servicio muy amable y atento.

Fuimos en septiembre al spa por un regalo smartbox y la chica de recepción nos trató de lujo.Estuvimos solucos como dicen ellos, podría decir que la bañera de hidromasaje necesita algún escalón para entrar, ya que , es muy alta.Y deberían hacer vestuarios, ya que, es un baño donde cambiarse.El hotel está en un alto y se ve bonito y tiene piscina exterior.

Con diferencia el peor hotel en el que me he quedado. Lo escogimos por la ubicación, buscando tranquilidad y resulta que la calle delante del hotel por las noches es una pista de carreras de motos y coches a altas velocidades. Las vistas y la ubicación lo mejor. Un hotel viejo, le hace falta una remodelación a gritos. La habitación un horror, las camas de madera y de tablas rotas y sueltas, sin aire acondicionado y apestando a humedad. El último día podíamos estar hasta las 12 y nos fuimos a las 9, con eso lo resumo todo. Eso sí, el personal un encanto.

Lo mejor del hotel la amabilidad de los empleados, un trato muy bueno.La habitación olía ha humedad, el Buffet del desayuno muy escaso, pan, croissant, algo de embutido y poco más, para ser 3 estrellas….La habitación, aparte de oler a humedad, está un poco desactualizada. El mobiliario bastante viejo.El parking no tiene vigilancia y lo peor que te puedes quedar sin sitio, buscas un hotel con parking y resulta que luego no tienes sitio.

El hotel lo elegimos porque teníamos un bono de spa de Smartbox y era de los poco hoteles cerca de nuestra zona que tenía convenio con este tipo de tarjetas regalo, y decidimos aprovechar y coger unos días en el hotel.Para nuestra sorpresa cuando llegamos el Spa nos dicen que no funciona, con lo cual de haberlo sabido con anterioridad quizá nos habríamos decantado por otro hotel más céntrico. Finalmente nos devolvieron el bono el cuál aún tenemos pendiente de corroborar si realmente sigue siendo válido.El hotel por fuera luce bien y la piscina está muy bien, lo único malo que todas esas entredaderas de la fachada son un nido de bichos, y si sales a desayunar fuera vas a tenerlos muy presentes, tiene parking por la parte de arriba donde en pleno agosto no tuvimos problema para aparcar.El hotel por dentro luce un poco más anticuado, no tiene un aspecto muy bonito almenos a mí parecer, las habitaciones son un poco reguleras, la tele que está en la pared es del tamaño de un monitor de ordenador de hace 15 años.El desayuno no es nada de otro mundo, pero no está mal, desde la terraza tienes buenas vistas aunque con la presencia de los bichos que mencionaba antes.En líneas generales es un hotel normalito, apartado del centro de Suances, con una atención buena pero sin nada especial, quizá la piscina o el parking por sacar algo positivo.Repetir? Pues sinceramente no es un sitio de los que me haya dejado con ganas de volver. Si pillas una oferta buena por algún comparador quizá te puede merecer la pena, tienes el rincón de Suso alado donde se como genial, pero poco más por lo demás queda muy apartado de Suances

El hotel está bien situado, con unas zonas comunes, comedor, terraza, piscina agradables.El personal muy amable.Las habitaciones necesitan ser modernizadas pero son correctas.Tenia media pensión, el desayuno correcto pero la cena mala, utilizan alimentos precocinadas de baja calidad, ensalada de bolsa, macedonia de bote, y la fruta que me ofrecieron piña natural me la sirvieron pasada. No me lo esperaba.Llama la atención con la calidad gastronómica que tiene Cantábria.Mi estancia fue en junio 23,