Hotel Balneari Vichy Catalan

Muy bonito y acogedor. La cena en el bar fue muy buena. Volveré para probar el circuito termal que no pude probarlo. Me gustó mucho el detalle gratis de una botella de vichy y dos latas. El sito es espectacular y tranquilo

Pasamos un par de noches en el hotel y hay cosas que están bien, pero para el precio que pagamos hay cosas que están muy mal. Habitación con limpieza justa, había hasta telarañas y una mancha de humedad enorme en el techo, y varios desperfectos, entre otros la ventana de la ducha que daba al exterior y entraban muchos mosquitos y moscas. La zona del balneario y piscina están muy bien, y me dio una masaje una chica llamada Claudia que lo hizo muy bien. El desayuno está bien. Soy celiaca y pude comer muchas cosas en el desayuno. Lo que menos me gusto fue la comida delRestaurante. Muy justa para el precio de 23€ el menú y más si tienes una intolerancia como yo, ya que está muy limitado, aunque al menos podía comer la verdad. Fue en general un poco decepcionante.

El balneario es un poco antiguo, le hace falta una reforma. Las camas y las almohadas súper incómodas.El circuito termal es muy básico y limitado. Fuimos a las 18 h y había mucha gente, todo muy normal. Lo que sí nos decepcionó bastante fue el servicio del bar restaurante de tapas. Pedimos una tabla de quesos que valía 18 euros y la mayoría de los trozos eran cortezas laterales. En definitiva, muy caro para lo que es. La atención del camarero muy desagradable, parecía enfadado y nisiquiera vino a ofrecernos los postres, después de estar esperando más de media hora nos fuimos sin tomarlos. El bufet del desayuno está bien, hay de todo y bueno.

El balneario necesita una renovación, aunque es un edificio histórico creo que se le podría dar un aire moderno sin perder su esencia.Los sitios comunes como recepción pasillos salones están poco cuidados, las moquetas de los pasillos viejas y con muchas manchas. Los muebles de recepción muy viejos y gastados. El bar también todo poco cuidado. En definitiva que falta una renovación muy completa.Las habitaciones están mejor ya que si que están renovadas, además que están limpias.El tema del spa no está mal pero creo que lo podrían tener mejor organizado, es un poco caótico el momento de la entrada a la sesión ya que coincide los que entran y salen y hay bastantes descontrol.La piscina exterior está muy bien aunque no pudimos disfrutar de ella.El desayuno está bien un poco justo a mi parecer pero la calidad buena.Cena muy bien, menú de fin de semana (25€) muy bueno y producto de calidad,los canelons buenísimos y el coulant espectacular.Pàrquing muy grande y sin problemas de aparcamiento.El personal muy amable y atento tanto en recepción como en el bar y comedor.

Muy amables y serviciales. Un poco antiguo pero bien cuidado y limpio. El circuito un poco corto. Fuimos a las 20,00 h y muy poca gente, muy bien, pero no había agua para hidratarse y el baño de vapor, no funcionaba. Todo no puede ser, a otras horas, había mucha gente. Satisfechos y buena experiencia.

Estuve con mi pareja dos días. El lugar es excepcional pero la gestión es bastante mala. La relación precio-calidad es nefasta; quiero decir muy caro para lo que se obtiene. El sitio es muy bonito y, dentro de un estilo clásico, cuidado y agradable. El spa es normal, el gimnasio ridículo y con 3 máquinas desvencijadas, viejas y rotas. Contratamos una botella de cava (20€) de bienvenida y el cava que sirven cuesta 3,50€ en la calle (aires de tramontana brut Jove). Con las comidas y cenas ofrecen un menú a elegir de 4 primeros y 4 segundos con postre y “solo” agua por 23€ (25€ festivo. El 7 de Diciembre nos querían cobrar como festivo). La variedad y calidad de los platos es baja: guisantes congelados rehogados o tortilla de patata de primero por ejemplo. Como opción de pescado del día nos ofrecieron caballa, que es un pescado vulgar y barato. El desayuno abundante pero de calidad muy normal. Usan manteles individuales de nylon a los que pasan una bayeta sin aclarar/limpiar y dan como limpios. Así vimos cómo limpiaban más de 20 mesas con sus correspondientes manteles. Seguro que no volveremos.

Pésima experiencia lo que tenia que ser una noche de spa con mi pareja fue una experiencia que no esperábamos, Instalaciones sin reformar y dejadez total (meados de perro en las alfombras, paredes sucias, pelos debajo la cama… un sin fin) eso no justifica que el hotel sea antiguo o tenga 3 estrellas. La limpieza va ante todo. Me intentaron compensar con una noche de más o SPA pero eso no quita todo el horror que tuve que pasar, no era ni saludable eras allí.

Una experiencia maravillosa!! Disfrutamos de la piscina climatizada exterior, del centro termal que está muy bien equipado y por supuesto del hotel, que esconde mucha historia. El servicio es magnífico, nos aconsejaron en todo momento y estaban pendientes a nuestras necesidades.La única pega que es por el que no le he dado las 5 estrellas es por el desayuno, muy poca variedad y calidad de producto justo.De todas maneras esperamos volver muy pronto!!

Buena limpieza y instalaciones en buenas condiciones. Lugar entrañable y perfecto para desconectar unos días tanto en pareja como sólo. Tengo que admitir que se pasan un poco con los precios del menú que va de 23€ hasta casi 26€ y la cafetería en la cual un cortado vale 2,20€, imaginaros lo demás. Pero quitando eso lo demás todo perfecto.

Sitio idoneo para desconectar y relajarse, silencio total en todas las instalaciones.El edificio es espectacular,cada rincón tiene su encanto,está todo decorado con mucho mimo,las fotos de los pasillos te transportan a otra época.Las habitaciones decoradas con elegancia y simpleza.El personal muy atento y agradable.Mención especial al desayuno, productos de calidad.Repetiremos seguramente.