Parador de La Seu d’Urgell

Buen destino para descansar, a 15 metros de la catedral de la Seu D'urgell y en pleno casco histórico de la ciudad.La atención es buena y su ubicación inmejorable (a 10 km de Andorra).Como pegas diría que la carta de comidas y cenas es escasa.

Excelente Parador, nuestra estancia ha sido de 4 días y ha resultado muy grata. Éramos 2 adultos con 2 niños, la habitación muy amplia, limpia y correctamente acondicionada. El personal es muy atento y fueron muy agradables con nosotros y los niños. Pudimos disfrutar del servicio de bar para cenar y el de comedor para la comida, en ambos casos excelentes (el mejor cordero que he tenido la oportunidad de comer). Un placer el poder haber sido huéspedes suyos. Felices fiestas y feliz Navidad.

Parador reformado a excepción de los baños aparentemente. Con parking de pago con diferente precio si es interior o exterior. Tiene piscina interior pero no funcionaba en la fecha que fuimos y el gimnasio tampoco. Falta de personal en comedor y alguna tardanza excesiva en servir los platos, ya fuera por cocina o los camareros de sala. Los trabajadores atentos pero desbordados en ocasiones.

Parador situado en la misma población de la Seu d'Urgell. La ubicación es muy buena ya que está cerca del centro. El parador es bonito, al entrar hay un claustro donde se puede tomar algo y se respira mucha paz y tranquilidad. Las habitaciones son espaciosas, el baño es correcto aunque una actualización no le iría mal. El personal del restaurante simpático y eficiente, en la recepción el chico que nos atendió no le hubiera estado mal un poco más de simpatía y empatia. El desayuno buffet muy correcto y los platos de la cena muy bien presentados, variedad en la carta y los productos y elaboración de muy buena calidad. Precio de la estancia de acuerdo con la calidad recibida.

Este parador es precioso… el ambiente es increíble y el personal siempre súper amable. El restaurante es caro para lo que sirven, ya que está bien, pero no está especialmente buena la comida.

Hemos pasado el fin de semana. El Parador magnífico en todos los aspectos. Ubicación privilegiada, no se precisa coche para visitar principales puntos de interés. Personal de recepción muy agradable y atento. La habitación espaciosa y cómoda. El personal del comedor también muy atento. La comida deliciosa. No dejen de probar la espuma de miel y mato. El desayuno muy completo zumo de naranja natural y platos calientes al momento. Resumiendo: Genial!!

Reservamos online la habitación superior, siempre que hemos ido nos han dado la habitación 319 ( en su momento nos dijeron que era la única habitación superior del hotel) que es la que sale en la foto de la web como habitación superior. Esta vez nos han dado la 310 que no tiene absolutamente nada que ver con la 319, muchísimo más pequeña, lavabo pequeño, vistas a la claraboya de la piscina y diferentes techos, ubicada en medio del pasillo delante de los ascensores y escaleras con todo el ruido que eso conlleva, para nada lo que se espera de una habitación superior.Se lo comenté a los recepcionistas y me dijeron que efectivamente esa era una habitación superior y que la 319 no era la única superior pero sí la de la foto y reconocieron que no tenía nada que ver con la 310.Me ofrecieron la 128 que era triple pero no la quise ya que era muy parecida a la 310.Considero que no vale la pena pagar de más por una superior que es muy parecida a una estandar y con peores vistas.Los recepcionistas se olvidaron de darnos la el ticket para la copa de bienvenida por ser amigos de paradores.El servicio del restaurante normal.Ubicación maravillosa.

Pasamos por este precioso lugar y como hacia calor decidimos pasar a tomar unos cafés. Sólo había una camarera para todo el salón, que nos pidió disculpas por la tardanza. El café con hielo tenía poco hielo y el café estaba muy caliente... Con lo cual mal.He ido a muchos paradores y es la primera vez que no quedo contento con el servicio.Supongo que habrá sido una cosa puntual.El sitio es bonito y muy bien climatizado para los días de calor.

Fue muy fugaz pero muy bonita.En cuanto al hotel precioso, con una decoración muy agradable sobre todo en el Salón Principal. Donde se está de maravilla. El personal en realidad fue encantador a todo lo que necesitemos, salvo una persona de personal que al hacerle una pregunta contesto muy de mala gana. Pero todo muy correcto en general.

Habiendo visitado el Parador de Cardona, el de la Seu se nos quedó un poco corto: la singularidad del edificio se queda en el salón/cafetería (que es precioso, por supuesto). Habitaciones correctas con amenities de todo tipo, que se agradece. El acceso a la piscina te da un poco de respiro en este verano tan caluroso (aunque ir con gorro de baño siempre es algo incómodo). El personal de recepción correcto, aunque no especialmente agradable.