El Cor del Montsant

Sucio, sucio, sucio. Meten a sus clientes en habitaciones sin ventilación, sin un triste ventanuco, junto al cubo de fregar y la escoba llena pelusas sucias. Los colchones tienen los muellas rotos y se clavan.Te dicen que te dan la toalla, pero no te dan ni una por persona. Hay radiadores que no funcionan, y el calefactor del baño funciona a medias, ojo con ducharse dos personas seguidas, que se acaba el agua del termo y tarda una hora(de reloj) en que nuevamente haya agua caliente, jabón de lavabo justito y papel higienico menos. Muy sucio.

Hemos pasado una semana en el precioso pueblo, la casa nos ha encantado. Eva ha estado pendiente de todo lo que hemos necesitado. Volveremos seguro.

Quieres perderte y olvidarte de todo. Vete allí. La anfitriona maravillosa, preocupada desde la reserva hasta que llegamos, le dimos un poco de guerra por las horas de llegada, pero nos lo puso todo lo fácil que pudo. Encima, hay una pastelería al lado para poder desayunar al levantarse. GRACIAS EVA!!!!!!!!

Estuvimos alojados en un segundo piso dos familias, dos de las habitaciones no tienen ventanas, el aire acondicionado no se puede mover del salón y de una habitación y además resulta muy ruidoso.El piso del suelo no está nivelado.La piscina estaba fuera de la casa

Nomas llegar. Eva ya quiso que pagaramos el piso... pero bueno se puede entender. Entramos al piso y la nevera no estava encendida, tardo 1 dia a enfriar-se, el piso es acojedor pero las camas de muelle i los cojines eran viejos y muy incomodos. Aire acondicionado era un par de pinguinos. La picina muy bien y eva mui atenta a todo, muy amable. Pero creo que no esta echo para gente con dolores de espalda, las camas horrorosas.

Es un sitio estupendo familiar la antencio fantástica como si estuviera en casa la casa espectacular un pueblo para ir a relajarse y ver cosas distintas de la ciudad para repetir muchas veces más lo recomiendo 100% eva eres la mejor nos as tratado genial volveremos a vernos

Eva es una gran anfitriona.Pudimos alojarnos con nuestros perretes.El piso es grande, pero al menos en el que estuvimos nosotros, las 3 habitaciones, es algo “simbólico “ hay una que está en medio, para acceder a ella tienes que pasar por alguna de las dos, por la que se entra por una cortina, y separada de la de en medio por una puerta que no cierra bien, o entrar por la que tiene puerta pero que separa de la habitación de en medio por una cortina. Y por poner otra pequeña pega, para acceder a la piscina, compartida con el otro alojamiento, tienes que salir a la calle y girar la esquina.Pero estuvimos genial, nos lo pasamos muy bien y es un lugar donde se puede repetir.La zona y el pueblo es ideal para desconectar.

Es un piso muy acogedor en un pueblo que te permite salir al 100% de la rutina. Esta muy bien equipado y cuenta con wifi. La propietaria muy bien.Lo malo es que se promociona como casa y es un piso. La piscina es compartida con otros pisos.

La verdad hay que reconocer que Eva es muy agradable y muy atenta, pero realmente desde mi humilde opinión no es lo que parece. Viendo opiniones, veo que hay gente que desde 2020 pone opiniones que los colchones son un desastre y muy incómodos y en todas sus respuestas es la misma que nos pone a nosotros, los colchones son nuevos"